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El guardameta

Un regreso aciago

El Santamaría más desentonado de la temporada después de más de un mes de inactividad colaboró decisivamente en los dos goles del Nàstic

Roberto Santamaría encaja el primer gol del Nàstic. laliga.es

Le ha sentado mal la inactividad a Roberto Santamaría, colaborador involuntario en los dos goles del Nàstic que noquearon al Mallorca en el Nou Camp de Tarragona. Y de paso puso en cuestión la elección de Fernando Vázquez, que le volvió a dar su confianza pese a que Jesús Cabrero había acumulado méritos para seguir bajo los palos.

Santamaría se colocó en la diana por culpa de una actuación muy floja. Cabe atribuir al portero navarro una gran cuota de responsabilidad en los dos goles de Muñiz en el primer acto y de Jean Luc en el segundo.

En el 1-0 Muñiz coló el esférico por la barrera directo a la red mientras Santamaría se quedó clavado en el césped. El guardameta estaba muy mal colocado y cuando vio aparecer la pelota era demasiado tarde para interceptarla.

El navarro estuvo todavía más desafortunado en el 2-1. Jean Luc le rompió la cintura a Joan Oriol y marcó por el palo defendido por Santamaría, que se hizo un lío y permitió que el balón traspasara la línea de meta.

Brandon reparó en parte el estropicio causado por el guardameta al firmar un doblete que valió para rescatar un punto. El Mallorca estuvo siempre más lejos de la victoria que el Nàstic, por lo que los bermellones tendrán que esperar a otra ocasión para paladear su primer triunfo a domicilio.

El debate sobre la portería estuvo muy vivo los días previos a la visita al colista. Prendió la mecha Cabrero cuando detuvo un penalti al Alcorcón la pasada jornada todavía con 0-0 en el marcador. Sin embargo, Vázquez tuvo clara la elección de Santamaría desde el principio.

El navarro tuvo que parar por una lesión hace cinco jornadas, poco antes de visitar al Lugo. En aquel momento cedió la meta a Cabrero siendo el cancerbero menos goleado de la Segunda División, con solo tres tantos encajados -uno de ellos de penalti-.

Los números de Cabrero no resplandecían tanto -encajó cinco goles- pero se recuerdan varias ocasiones en las que sacó una mano o un pie que mantuvieron a flote al Mallorca.

Es del todo improbable que Vázquez recule y devuelva la titularidad al oscense. Sí cabe esperar que Santamaría se ponga a tono después de otra semana de entrenamientos y recupere la versión del arranque de temporada.

A Cabrero le tocará esperar una nueva oportunidad, aunque para ello tendrán que mediar sanciones o una nueva lesión del portero navarro. El aragonés se resignó a vivir a la sombra de Timon el pasado curso. Y este año va por el mismo camino.

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