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LaLiga 1|2|3

El penúltimo muro psicológico

El Mallorca tendrá un ´golaverage´ favorable cuatro años después si gana el domingo en el feudo del colista Nàstic

El penúltimo muro psicológico

El Real Mallorca tiene la oportunidad el próximo domingo de romper una estadística negativa que se le resiste desde la última temporada que militó en Primera División, cuando tuvo el ´golaverage´ positivo. Desde entonces han pasado 167 jornadas en las que el conjunto bermellón ha soportado el lastre de contabilizar más goles encajados que goles marcados. Un muro psicológico que podría derribar en el feudo del Nàstic de Tarragona, colista de la categoría, en caso de ganar.

Bastaría una victoria por la mínima para que el Mallorca arrojara un saldo positivo por primera vez desde el 22 de octubre de 2012, cuando se disputó la octava jornada de Liga en Primera División. El equipo entrenado entonces por Joaquín Caparrós cayó 3-2 en su visita al Sánchez Pizjuán. Pese a la derrota, mantuvo un balance favorable de diez goles a favor y uno en contra. Fue la última vez que eso sucedió hasta la fecha.

El grupo de Fernando Vázquez cuenta a día de hoy con la balanza equilibrada: ocho tantos marcados y otros ocho encajados. El colista brinda una inmejorable oportunidad de salir de los números rojos cuatro años después y de paso conquistar la primera victoria a domicilio de la temporada. Ya es hora cuando está a punto de consumirse el primer tercio del campeonato.

Haber arrancado con derrota las cuatro temporadas que el Mallorca lleva en Segunda División ha sido determinante para que los rojillos no sepan todavía qué es contar con un ´golaverage´ positivo. Eso, y la nula capacidad demostrada por el equipo para remontar el rumbo inmediatamente después de los bofetones iniciales, ha condicionado la estadística y su devenir posterior por la categoría de Plata.

El conjunto bermellón contabiliza desde aquella octava jornada de la campaña 2012/13 un total de 177 goles a favor y 237 en contra. Un saldo negativo de sesenta tantos, lo que explica en buena medida el fracaso deportivo de los rojillos estas últimas temporadas.

Este curso el bloque de Vázquez ya ha estado una vez a las puertas de convertir los números rojos en negros. Fue en la novena jornada, cuando el equipo endosó un 3-0 al Huesca. El ´golaveraje´ quedó en seis goles a favor y otros seis en contra. Pero la derrota una semana después en el feudo del Levante (2-1) prolongó el maleficio.

Hace dos temporadas los rojillos también tuvieron una ocasión inmejorable de normalizar sus números y soltar un lastre que ya empezaba a resultar demasiado pesado. Entre la jornada 12 y la 21 el grupo que dirigía Valeri Karpin tuvo varias ocasiones para salir de los números rojos. Pero hasta cuatro veces se le negó el triunfo que necesitaba, el equipo fue perdiendo altura y el ruso acabó dando paso a Miquel Soler en el banquillo.

Fueron momentos excepcionales. El Mallorca ha sufrido mucho en defensa estas últimas temporadas, encajando derrotas abultadas con frecuencia, con lo que la mayoría de las veces ha presentado un ´golaverage´ ampliamente negativo. Por ejemplo en la misma campaña 2014/15, cuando acabó el curso con un saldo desfavorable de trece goles. El récord lo marcó la temporada del descenso, cuando el balance en la jornada 35 era de 38 dianas a favor y 70 en contra. Una estadística terrorífica que condujo al Mallorca a la Segunda División solo tres semanas después.

Así pues, el Mallorca tiene ante el Nàstic una oportunidad de oro para poner en orden su ´balance goleador cuatro años después. No será fácil; los tarraconenses contabilizan una sola derrota en su feudo, aunque también es cierto que no han ganado todavía ningún partido como locales.

Su condición de colistas es como siempre un arma de doble filo. El grupo de Vázquez puede explotar la ansiedad de un rival temeroso de encajar una derrota que le desenganche de la clasificación; por otro lado, se encontrará con un equipo muy motivado para salir del pozo.

La otra obsesión

En caso de conquistar el triunfo, quedará otra barrera psicológica que superar: pisar zona de promoción por primera vez desde el descenso. Los mallorquinistas acumulan ya 137 jornadas consecutivas sin haber logrado dormir una sola semana entre los seis primeros de la clasificación, lo que les convierte en una rareza en la categoría.

A día de hoy el grupo de Vázquez está a solo dos puntos de la sexta plaza, ocupada por el Oviedo, pero en medio hay un pelotón de equipos. Si el Mallorca quiere apuntar seriamente a la zona de ´play-off´, va a necesitar una racha victoriosa -empezando por el domingo- y una carambola de resultados favorable.

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