El gran protagonista fue Brandon con sus tres goles, pero a su lado Lago Junior demostró que actuando como delantero puede crear peligro para hacer daño él mismo o el propio ariete de Cala d´Or. El africano dejó la banda para ponerse como punta de referencia y el Mallorca salió beneficiado. Entró mucho en juego, buscando tanto el desmarque en ruptura como apoyándose con sus compañeros. Es cierto que adelantarse en el marcador a los tres minutos facilitó el trabajo, pero es que a los seis ya forzó una ocasión en la que su remate, que superó al meta Herrera, fue despejado defectuosamente por un defensa del Huesca y Brandon culminó para instalar el 2-0. El ex del Mirandés estuvo cómodo, incluso asistió de tacón y probó fortuna con disparos, pero se quedó con las ganas. No obstante, este es el camino.
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La cara...