No está siendo una buena temporada para Dejan Lekic, un futbolista que vino para ocupar una demarcación estratégica en el Real Mallorca y que ocho jornadas después está siendo irrelevante. El serbio, que se unió a la disciplina bermellona el 12 de agosto con la responsabilidad de marcar los goles del equipo, regresó ayer a una convocatoria después de permanecer un mes de baja por lesión. Estuvo a disposición de Fernando Vázquez las tres primeras jornadas de Liga, tiempo insuficiente para encontrar un sitio en el equipo.

El atacante tendrá otra oportunidad de reivindicarse esta tarde ante el Huesca, aunque es improbable que salga de inicio por la falta de ritmo de competición. También Vázquez se felicita por ganar otro efectivo que le dé más posibilidades en una parcela ofensiva bajo sospecha después de que el Mallorca solo contabilice tres goles.

Lekic sumó 62 minutos en las tres primeras jornadas, cuando Vázquez recurrió a él buscando un revulsivo en los minutos finales. Sin embargo, el ‘9’ fichó para ser un fijo en el once.

Después de recibir varias calabazas y con el presupuesto al límite, el Mallorca reclutó al delantero serbio y le dio la responsabilidad de ser el hombre-gol del Mallorca esta temporada. Con una plantilla bien provista de mediapuntas y hombres de banda, Lekic era el único que se movía con naturalidad en la punta de ataque. Sin embargo, apenas ha podido tener protagonismo.

Una vez recuperado su mejor tono físico, Lekic debería ser importante en una plantilla en la que todos los delanteros están en horas bajas. Óscar Díaz, Brandon y Dalmau están ofreciendo un rendimiento menos que discreto.

Esta tarde la temporada empieza de cero para Lekic, que tiene varias semanas para convencer a la dirección deportiva de que no será necesario echar mano de la cartera en el mercado invernal.

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