Fernando Vázquez se mostró rotundo cuando fue preguntado si creía que su cargo como entrenador del Mallorca corría peligro. "No depende de mí, pero en verdad no temo por mi puesto", destacó en la pequeña sala de prensa del Anxo Carro. Eso sí, el gallego admitió que la derrota ante el Lugo les deja muy tocados: "Sé que hay que ganar, lo tengo muy claro".

El preparador lamentó los fallos que provocaron la derrota de su equipo. "Los errores se pagan, no vi hacer muchas paradas a nuestro portero. No voy a presumir de hacer un partido extraordinario, pero competimos bien ante un equipo complicado y difícil y que aprovechó nuestros fallos", comentó antes de pararse a reflexionar acerca de la acción del segundo gol de los lucenses. "Es que tiene un valor importantísimo. Les concedimos en una jugada de peligro que podría haber sido nuestra y se convierte en un contraataque de gol. En defensa no estabámos teniendo errores, llevabámos tres goles y hoy -por ayer- encajamos tres. Es lo que hay", apuntó.

Vázquez asumió que no supieron gestionar la ventaja en el marcador. "Tendría que ver el gol del empate, pero es cierto que si nos adelantamos y sabemos que es difícil que nos marquen, lo normal es pensar que el Lugo no lo tendría fácil. Y lo tuvo". Vázquez no quiso entrar a analizar si la planificación de la plantilla es mala. "No me considero víctima de nada, soy el entrenador y juego con el equipo que tengo, a nivel de resultados no están bien, pero confío en que se enderece. Cuando pasan partidos y solo ganas de vez en cuando, uno puede buscar las causas que quiera, el fútbol es tan complejo que permitiría cincuenta mil teorías", dijo. Y acerca de la insistencia en apostar por Moutinho, el técnico, que admitió que baraja cambios en "cómo afrontar los partidos", respondió: "No me empeño en un jugador, si no me da rendimiento pasa a la cola".