José Ramón Sandoval, técnico del Rayo Vallecano, desmintió en rueda de prensa haber agredido a su futbolista Miku tras una discusión entre ambos posterior a la derrota por 3-0 ante el Almería. "Ha quedado claro que no hubo agresión. Ha habido alguien que ha querido hacer daño al club. Hubo alguien que quiso removerlo. Vamos a esperar que eso se diluya pero los problemas no existen dentro. Ha quedado todo clarísimo dentro del vestuario", comentó antes del duelo contra el Mallorca. "Hemos hablado otra vez en el vestuario y ha quedado todo muy claro. Está todo el equipo a una. Nos ha hecho daño que se filtre una cosa interna nuestra de hace cinco días. Ahora ya solo hay que mirar adelante. Han sido maduros para atajar la situación y estamos mucho más fuertes que a principio de temporada en todos los aspectos", afirmó también.

En la misma línea, dijo: "Todo el mundo estamos a una. Todos nos equivocamos, todo el mundo en este club tiene la suficiente capacidad para pedir perdón cuando se equivoca". "A partir de ahí, estamos agarrados de la mano mirando por un objetivo, el que quiera que se lo crea y el que no, que no. Ahora hay que trasladarlo al campo y al día a día. Ha habido un punto de inflexión, como nos han querido hacer daño nos hemos unido mucho más y eso es bueno", completó.

Sobre el rival, destacó: "Me preocupa el aspecto táctico del Mallorca, que no ha conseguido los puntos que se ha merecido. Ha podido puntuar más. Está muy bien estructurado, tiene piezas. Tiene jugadores con una calidad tremenda, con movilidad, con verticalidad. Vamos a tener que hacer las cosas muy bien para poder ganar", concluyó.

Además cree que el horario de las doce de la mañana es positivo: "Es lo máximo ese horario aquí. Es el mejor horario para la afición de Vallecas y vamos a tener como siempre el respaldo de la afición. Quieren once hinchas que se dejen la vida y si somos capaces de comulgar con ellos será una mañana maravillosa".