Pep Lluís Martí: "No quiero ver a nadie hasta que acabe el partido"

-Un mallorquinista declarado como usted puede dejar muy tocado al club de su vida.

-No me queda otra. Evidentemente soy mallorquinista y socio de toda la vida, le deseo lo mejor al Mallorca y espero que se pueda salvar, pero a día de hoy quiero ganar el partido con el Tenerife y meternos en el play-off.

-Hace unos meses ni se hubiera imaginado estar en esta situación.

-Pues sí porque reconozco que jamás hubiera pensado que un club tan importante como el Tenerife me habría dado esta oportunidad. Pero además los resultados nos están acompañando porque la dinámica es muy positiva. La racha es muy buena, con una derrota en doce partidos y nos encontramos en una situación que en los cinco últimos partidos nos jugamos la vida para meternos en un play-off de ascenso. Mejor no ha podido salir.

-Usted tiene toda la experiencia del mundo como jugador, pero no como entrenador. ¿Cuál es la clave de su éxito en el banquillo?

-El éxito son los futbolistas porque son los que juegan y los que interpretan bien el juego. Cuando llegué al Tenerife les intenté imprimir mi carácter ganador y que tuvieran ambición y que salieran a ganar cada partido fuera quien fuera el rival y el estadio en el que se jugara. Y transmitirles la confianza de lo buenos que son ellos, el Tenerife les fichó por algo y, por eso, les pido que confíen en ellos. Aquí han dado un paso hacia adelante y los resultados nos han acompañado. A partir de ahí, todo es más sencillo.

-Tienen la promoción de ascenso a cinco puntos.

-Con la dinámica en la que estamos y con el buen juego que hace el equipo, mostrándose ambicioso y valiente, que juega la pelota en el campo contrario y que crea muchas ocasiones, pues no pensamos en otra cosa que en ganar los cinco partidos. Y ahora principalmente el primero, que es justamente el del Mallorca.

-Qué extraño va a ser para usted llegar a Son Moix, ya no solo como entrenador, sino como adversario del Mallorca.

-Supongo que sí, no me quiero hacer una versión en la cabeza de lo que pasará. Los momentos hay que vivirlos, será especial, bonito, pero no difícil, más bien lo contrario. Va a ser algo para disfrutar y que salga como tenga que salir. No voy a ir preparado para nada en concreto. Es la oportunidad de volver a casa y con un triunfo, que es lo que necesita el Tenerife. Pero es verdad que será una sensación extraña y diferente sentarse en el banquillo de Son Moix y hacerlo en el banquillo contrario.

-Toda la gente que se encuentre a su llegada va a ser conocida para usted.

-No lo quiero pensar. De hecho, ya le digo que le he prohibido a mi gente, menos a mi madre y mi hermano, que vengan a verme al hotel porque prefiero estar centrado en mi trabajo. Soy un profesional y voy a defender los intereses del Tenerife. Es una semana especial y que no tiene nada que ver con otras.

-¿Qué tipo de partido espera?

-Muy igualado como todos los de este tramo final de Liga. Vamos a ver si somos capaces de mantener esta dinámica de mantener la posesión en el balón, ser protagonistas e ir con cuidado con el Mallorca, que no nos haga daño a la contra. Pero a veces las cosas no salen como quieres y nos tenemos que adaptar a lo que sea el partido.

-Usted ya da por seguro que tendrán más posesión que el Mallorca.

-Es que es lo que estamos haciendo en los últimos partidos. Siempre hemos tenido más posesión que el rival, sea en casa o no, y esta es nuestra idea porque nos encontramos más cómodos que sin él.

-Desde fuera, ¿qué cree que le está pasando al Mallorca?

-Desde fuera es difícil decirlo, como dice usted. Es una pregunta para hacer a los que están ahí, desde la distancia hacer un juicio de valor sería injusto porque no tengo todos los datos. Ya le digo que no sería justo por mi parte, los de dentro tendrán más detalles. Pero a los jugadores del Mallorca no les queda otra que asumir la situación que están viviendo y hacerlo lo mejor que puedan.

-En la plantilla del Mallorca todavía quedan jugadores que fueron sus compañeros.

-Sí, por supuesto. Hasta el año pasado eran compañeros y sé lo que pueden rendir y lo que piensan, pero después cada futbolista interpreta un partido de una forma diferente.

-Se va a reencontrar con Vázquez.

-Pues sí. Fue el entrenador que me hizo debutar en Primera División en un partido contra el Alavés. Es un grandísimo técnico que si ha estado en la elite durante tantos años es porque ha demostrado lo que vale. No tuve suerte con él porque tuve pocos minutos, solo dos partidos, pero en el fútbol eso no significa que no tengas un buen trato con él.

-¿Le ha llamado mucha gente del club o de la isla?

-Me han llamado y me han enviado mensajes, pero no hemos hablado de fútbol, eran temas más personales y hablando sobre la posibilidad de si voy a tener tiempo libre para verles. Y ya les dije que no quiero ver a nadie hasta que acabe el partido . Eso es lo único que hemos hablado. No hemos hablado de la situación del Mallorca ni cómo juegan ni nada por el estilo porque creo que no es conveniente.

-¿Cree que el Mallorca se mantendrá en Segunda?

-No lo sé porque esto es muy difícil y se trabaja día a día. Hay que salvarse lo antes posible y para eso hay que vivir el día a día y el partido a partido. Lo idílico para mí sería que el Mallorca se salvara y que el Tenerife se metiera en el play-off.

-¿Le ofrecieron entrenar a un equipo de las categorías inferiores del Mallorca cuando supo que no seguiría como futbolista rojillo?

-Estuvimos en contacto con el club, pero yo tenía la posibilidad de ir a jugar a Estados Unidos y esa era mi primera opción, pero salió esta oportunidad del Tenerife y me vi obligado a aceptarla. Que un club tan importante como el Tenerife, en Segunda División y sin yo tener ninguna experiencia, me ofrezca su banquillo, era una oferta irrechazable. Al final ha salido bien.

-Ustedes se han quejado mucho de los árbitros esta semana.

-Es que hemos tenido tres jornadas seguidas que se nos han ido cinco o seis puntos condicionados por errores arbitrales muy importantes. Simplemente hemos trasladado lo que piensan nuestros aficionados y nosotros a los organismos competentes.

-¿Ha pensado en dirigir al Mallorca alguna vez?

-Sí, pero quiero vivir el día a día. No quiero pensar en el futuro más allá de eso. El entrenamiento de mañana, el viaje a la isla, el partido del sábado y así sucesivamente. La vida está para aprovecharla y estoy muy orgulloso de tener esta posibilidad que me ha dado el Tenerife.

-Ahora que está en el otro lado después de tantos años como futbolista profesional, ¿entiende más a los entrenadores?

-Es que he sido muy comprensivo toda mi vida y siempre me he puesto en el puesto del otro y con los entrenadores que he tenido lo he hecho. Siempre acepté las tomas de decisiones, aunque no me gustaran, pero hay que respetar al que manda, como hice yo. Creo que tuve la virtud de saber entender lo que hacía el entrenador y por qué lo hacía.

-¿Echa de menos su etapa como futbolista?

-Sí, por supuesto. Sufro por no poder intervenir porque me gustaría y me encuentro bien todavía para jugar, pero he cambiado mi faceta y estoy contento de interpretarla cada vez mejor.