Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Liga Adelante

Peldaño a peldaño

El Mallorca sigue instalado en la zona de riesgo de la tabla, pero las dos últimas victorias y el optimismo que se ha adueñado del vestuario invitan a mirar hacia arriba

El entrenador del Mallorca, Fernando Vázquez.

­El Real Mallorca vive en un estado de excitación pese a ocupar la parte baja de la clasificación. La llegada al banquillo de Fernando Vázquez ha sido un revulsivo eficaz que se ha saldado con dos victorias en los dos partidos que ha dirigido. Las gestiones de Maheta Molango en el mercado invernal han servido para fichar jugadores de un perfil alto en Segunda que prometen gol. Y se ha instalado en el vestuario una renovada confianza que invita a soñar con una gesta.

No parece quedar nada de aquel grupo desmadejado que solo fue capaz de conquistar cuatro victorias en toda la primera vuelta. El Mallorca sigue habitando en la zona de riesgo de la tabla, a solo dos puntos de la zona de descenso que marca el Albacete. Pero las dos últimas victorias ante el Alcorcón y la Ponferradina, y el positivismo que planea sobre Son Bibiloni, han logrado que el equipo vuelva a mirar hacia arriba -aunque sea de reojo- pese a que once puntos separan a los bermellones de la sexta plaza. Todavía un abismo.

A Vázquez le gusta colorear los guarismos del Mallorca para hacer fácilmente entendible cuál es la situación del equipo y a qué debe aspirar a corto plazo. “Ahora estamos en números rojos. Cuando estemos en verde, ya pensaremos otra cosa que no sea salvarnos”, valoró en la previa del encuentro contra la Ponferradina.

El técnico gallego asumió el mando del vestuario cuando el cuadro bermellón ocupaba plazas de descenso. Después de la derrota contra el Valladolid que costó la destitución a Pepe Gálvez el Mallorca durmió en decimonovena posición con veinte puntos, a dos de la salvación.

Dos victorias después los números ‘verdes’ de Vázquez siguen siendo una posibilidad remota, pero sus futbolistas han salido de la zona más abrasadora de la clasificación. El equipo es ahora decimosexto, lo que le sitúa en un peldaño algo más templado aunque el descenso está todavía a solo dos puntos.

La visita el domingo del Bilbao Athletic, colista destacado de la categoría, brinda una oportunidad inmejorable para encadenar un tercer triunfo que permita al grupo rojillo encaramarse a un escalón de la tabla algo más confortable.

Las cuentas estaban claras después de aquella debacle contra el Valladolid: era necesario conquistar diez victorias en los siguientes 21 partidos para conquistar la permanencia. Superadas dos jornadas, quedan ocho victorias para ilusionarse con el ‘play-off’.

De puertas hacia afuera tanto Molango como Vázquez evitan en todo momento presentar candidatura a la pelea por el ascenso. “Nos dicen que la tocamos de maravilla, pero lo único que tocamos es el fondolo único que tocamos es el fondo”, argumentó el consejero delegado el martes. El objetivo de pelear el ascenso se aplaza oficialmente hasta la próxima temporada, pero la incorporación de futbolistas de alcurnia este mercado de invierno invita a pensar que la propiedad no descarta intentar asaltar la Primera División este mismo curso.

No se ha abierto una gran brecha entre los equipos de la parte de abajo y los de arriba en una competición extremadamente igualada. Pero la realidad sigue siendo dura para el Mallorca. Hay que subir al siguiente peldaño.

Compartir el artículo

stats