El primer fichaje de la etapa de Robert Sarver en el Mallorca se llama Pol Roigé. "Estoy muy ilusionado, es un paso muy importante para mí y un escalón más en mi carrera", confesó ayer radiante a DIARIO de MALLORCA el extremo del Sabadell, que tiene previsto viajar mañana a la isla, o el mismo lunes, para ser presentado en la sala de prensa del Iberostar Estadio.
El club, que descartó ayer hacer oficial la contratación, pagará 150.000 euros por hacerse con los servicios de este prometedor futbolista, aunque en el acuerdo, según informa Diari de Sabadell, están contemplados más pagos en función de algunas variables, entre 75.000 y 100.000 euros, si el catalán disputa un número determinado de encuentros o si los bermellones ascienden a Primera División. De esta manera se alcanzarían los 250.000 euros de cláusula de rescisión que tiene el futbolista con la entidad arlequinada.
Pol Roigé, de 21 años, ha maravillado en este inicio de temporada en el grupo tercero de Segunda B. Es un extremo diestro que se caracteriza por su gran velocidad, por su capacidad de desborde y su talento en el uno contra uno. Además, tiene llegada. En este curso ha marcado cinco goles en 1.287 minutos, repartidos en dieciséis partidos. El jugador de Castelldefels, que admitió que tiene muchas ganas de vertirse de bermellón, aseguró que está en condiciones de debutar lo antes posible. "Estoy preparado para jugar ya porque tengo ritmo de partidos, aunque este fin de semana me entrenaré por mi cuenta", explicó.
El atacante, que también era pretendido por el Betis para reforzar su filial, puede actuar por las dos bandas y, aunque empezó jugando más por la derecha, en el Sabadell ha destacado también por la izquierda. No es un 'nueve' puro, pero también puede actuar por detrás del ariete de referencia. "Es muy agresivo, tiene mucho recorrido en el ataque", destacan los que le conocen bien. Roigé pasó por las canteras del Barcelona, Real Madrid y Espanyol, pero no pudo quedarse.
Escalones
El Sabadell le recuperó para su filial de Tercera División el curso pasado, procedente del Castelldefels de la misma categoría. Allí deslumbró tanto que subió al primer equipo, que luchaba por salvarse en la Liga Adelante. El técnico Álex García le hizo debutar en el fútbol profesional y, después, con Juan Carlos Mandià, también gozó de minutos -383 en siete partidos, sin goles- en un equipo que no pudo evitar el descenso. Esta temporada, ya con galones, ha sido la referencia en la Nova Creu Alta, aunque el Sabadell se mantiene en la parte media de la tabla. En Mallorca vivirá otra historia.
