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Fichajes

Un mercado muy volátil

Fichar en enero es terreno pantanoso para un Mallorca que se ha apuntado más fracasos que éxitos desde la temporada del descenso - Los aciertos de Xisco, Yuste o Hutton se contraponen a los pinchazos de Cadamuro, Iriney o Albert Riera

Miquel Àngel Nadal, en una imagen del pasado verano en Son Moix. Manu Mielniezuk

Acudir al mercado de invierno supone adentrarse en terreno pantanoso. Lo sabe bien un Real Mallorca que desde la temporada del descenso se ha apuntado más fracasos que éxitos en su intento por corregir el rumbo deportivo del equipo. Enero ofrece pocas gangas y muchas incertidumbres, por lo que cada incorporación implica un riesgo muy alto.

Miquel Àngel Nadal y el ‘scouter’ Gerardo Fuentes llevan semanas peinando el mercado en busca de futbolistas que den un salto de calidad a la plantilla. Urge comprar gol y los dos futbolistas que encabezan la lista de prioridades son Borja Viguera, delantero del Athletic de Bilbao que no entra en los planes de Ernesto Valverde, y Borja Mayoral, atacante del Real Madrid Castilla al que Rafa Benítez apenas ha concedido oportunidades en el primer equipo.

El dinero no debería ser un problema. La ampliación de capital de casi 21 millones de euros que está en marcha permite al club el tope salarial en algo más de dos millones de euros. Una pequeña fortuna para las cantidades que se manejan en la categoría de Plata.

En el club se recuerda el éxito con el que se saldó el último mercado de invierno. Y a eso se agarra la directiva para creer que el equipo puede remontar el vuelo. Oficialmente, la entidad bermellona todavía no quiere tirar la toalla en cuanto al objetivo de subir a Primera División en el año del Centenario.

Xisco Jiménez, Héctor Yuste y, en menor medida, Joselu, fueron tres incorporaciones exitosas que garantizaron una permanencia sin apuros a final de la temporada. Lo que no dejó de resultar una decepción teniendo en cuenta que Miquel Soler había heredado de Valeri Karpin los mimbres suficientes para acabar al menos en puestos de promoción de ascenso.

El borrón de Albert Riera

Albert Riera fue la única nota discordante. El manacorí firmó una temporada y media en marzo, después de dos meses entrenando con el grupo para recuperar la forma. El manacorí debía ser una pieza importante sobre todo este curso, pero un duro enfrentamiento con Soler acabó con la rescisión de su contrato y con un borrón importante en la hoja de servicios de un futbolista de la casa y que además había ganado la Copa del Rey en 2003.

Marco Asensio y el citado Xisco -marcó nueve goles en apenas cuatro meses- formaban un ataque absolutamente contrastado en Segunda División, pero el mallorquinismo solo se permitió ilusionarse durante un par de jornadas.

Hubo menos suerte -o acierto- en el mercado de invierno de la campaña 2013/14. Llorenç Serra Ferrer había diseñado un proyecto que debía regresar a Primera División por la vía rápida. El Mallorca tenía el mayor presupuesto de la categoría, era el gran favorito para el ascenso y en verano había realizado incorporaciones de campanillas como Gerard Moreno y Geijo, entre otros.

Pero algo iba mal. El equipo que dirigía José Luis Oltra no había sido capaz de meterse en ‘play-off’ durante los primeros meses de competición y hubo que tirar de billetera en enero. Llegaron Iriney, Generelo, Cadamuro y Razzagui, pero ninguno de ellos cumplió con las expectativas.

Aquel curso acabó en un mayúsculo fracaso deportivo y el gran favorito al ascenso acabó salvando la categoría en una agónica última jornada. De los cuatro refuerzos invernales, solo Generelo empezó la pretemporada, pero acabó marchándose al Oviedo pese a que el conjunto asturiano todavía militaba en Segunda B.

En la temporada del descenso sí se fichó calidad, pero no sirvió para reconducir el rumbo de un Mallorca que con Caparrós al timón se iba de cabeza a Segunda. Alan Hutton, Fernando Tissone y Antonio Luna subieron el listón de la plantilla y rápidamente se asentaron en el once. Pero el conjunto bermellón se quedó corto en su reacción y acabó por confirmar el drama en la última jornada. Hoy todavía purga aquel mal curso en la categoría de Plata.

Esta vez la dirección deportiva va a poner el foco exclusivamente reforzar la parcela ofensiva. Nadal firmará a dos delanteros, un mediapunta y un centrocampista ofensivo. O lo que es lo mismo, dos ‘nueves’, un ‘diez’ y un ‘ocho’. Al margen de Viguera y Mayoral, figuran en la lista delanteros centro un alemán, un francés y un sudamericano. Muy pocas veces el Mallorca ha dado con un filón en un mercado invernal tan complicado, aunque fue un mes de enero cuando la entidad balear fichó al mejor futbolista de su historia: Samuel Etoo.

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