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Liga Adelante

Un ataque de mínimos

El Mallorca ha marcado dos goles en cinco jornadas, uno de penalti, lo que le convierte en el equipo menos realizador de la categoría - Esta sequía se explica en gran parte por la falta de un pasador y el bajo nivel de forma de varios futbolistas

Brandon.

El Real Mallorca se diluye en las cercanías de la portería rival, lo que le ha convertido en el equipo menos realizador de la categoría transcurridas cinco jornadas. El grupo de Albert Ferrer solo ha conseguido materializar dos goles -uno de ellos de penalti-, estadística que ha puesto el foco sobre los hombres ofensivos del equipo. Ahora que la defensa funcionaba razonablemente bien, es el ataque el que no carbura.

El bagaje arriba es extraordinariamente pobre, y pese a todo el Mallorca suma cuatro puntos. Los tres logrados gracias a la pírrica victoria lograda ante la Ponferradina (1-0) y el empate a nada contra el Numancia (0-0).

Arana sentenció de penalti a los leoneses y Bianchi marcó un tanto estéril al filial del Athletic, pero al menos sobre el italiano recae el honor de haber visto puerta en una jugada. En los otros tres partidos de Liga y el de Copa el Mallorca acabó con un rotundo cero en su casillero de goles.

El problema viene de lejos, de una pretemporada en la que en medio de experimentos y probaturas el Mallorca empezaba a destacarse como un equipo peleado con el gol. Más o menos sólido atrás, el grupo bermellón naufragaba cuando llegaba a la zona de creación.

Cinco jornadas después, esta difícil relación con la portería rival amenaza con cronificarse. El domingo se vio a un Mallorca más suelto de lo habitual, pero igualmente impotente en la finalización. El Nàstic ganó haciendo lo justo y aguantando los diez minutos finales de asedio del cuadro bermellón. El Mallorca, lanzado a la desesperada en busca del empate, topó contra un rival colgado de su portería y un árbitro que obvió un claro penalti sobre Bianchi en el descuento.

Hay varias causas que pueden explicar esta sequía, pero la más probable es el bajo estado de forma de la mayoría de los hombres de ataque del conjunto bermellón. A Coro, Bianchi y Acuña les pilló el inicio de la competición después de una corta pretemporada a las órdenes de Ferrer; a Brandon parece pesarle la responsabilidad y Fofo tiene un papel muy secundario.

Ni las bandas

La aportación de los hombres de banda también está siendo muy limitada. Pereira y Arana se perfilan en este inicio liguero como titulares, pero apenas envían centros con peligro. El francés anima a ratos el juego ofensivo rojillo, pero como sucedió la pasada temporada ninguno de sus intentos condicionan el marcador. Solo Moutinho escapa de la mediocridad cuando tiene minutos, pero de momento es un habitual del banquillo.

El equipo echa de menos un pasador, un futbolista que juegue entre líneas y haga circular la pelota con criterio en las inmediaciones del área rival. Ferrer cree que Brandon puede cumplir con esa función, pero hasta la fecha el canterano se ha dejado ver poco. Fofo, otro mediapunta, no remonta el vuelo después de que este verano tuviera abierta la puerta de salida, y Coro está desconectado.

A día de hoy queda claro que el club no ha logrado sustituir con éxito a Xisco Jiménez y a Marco Asensio, dos futbolistas que desequilibraron varios partidos y aseguraron una permanencia sin apuros en la categoría. Ferrer afirma públicamente que se trata de un problema coyuntural y que se resolverá por sí solo con el paso de las jornadas.

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