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La crónica

El Mallorca suda su primer triunfo

Los rojillos saben sufrir para estrenar ante la Ponferradina su casillero de victorias en un partido en el que jugaron en inferioridad durante 32 minutos por una absurda pero justa expulsión de Acuña - Arana marca de penalti en un buen inicio y el meta Timon cuaja una fantástica actuación

Este Mallorca es otra historia. Demostró que sabe defender, que sabe atacar, aunque tiene que mostrar mucha más pegada, y sobre todo, que sabe sufrir. Porque esta primera victoria de la temporada del Centenario es de las que refuerza. Jugó treinta y dos minutos con uno menos por una absurda expulsión de Acuña en un partido en el que a ratos jugó bien, como los primeros veinte minutos, y en otras demostró oficio para defenderse y no perder las compostura ante una Ponferradina que lo intentaba (1-0). Es cierto que el triunfo llegó de penalti, transformado por Arana, y que Timon realizó grandes paradas, pero los bermellones no se parecieron en nada a los que cayeron en Alcorcón.

Hay muchas cosas por mejorar, faltaría más en un 31 de agosto, pero hay motivos para ilusionarse. Los 8.715 espectadores que acudieron al estreno de su equipo en el Iberostar Estadio evidenciaron que tienen ganas de divertirse y de olvidar las tres espantosas anteriores temporadas, incluida la del descenso. No es que el encuentro de ayer fuera precisamente un espectáculo, ni de lejos, pero estos tres puntos representan una enorme inyección de autoestima para la plantilla y el mallorquinismo.

Empezar bien la temporada es fundamental, tal y como quedó claro en las dos pasadas campañas, por lo que ahora los duelos ante el Bilbao Athletic, Numancia y Nàstic de Tarragona deben servir para que esta victoria no sea un espejismo. Ferrer ya tendrá a toda la plantilla a su disposición -ayer Bianchi se fue a la grada por no tener el transfer internacional-, por lo que ya no habrá tiempo para excusas. ?

Hacía tiempo que los rojillos no empezaban tan bien un partido. Cuajaron unos fantásticos veinte minutos iniciales, con ritmo, intensidad y muchas ganas de agradar liderados por el propio Brandon, que quiere dejar claro que hace tiempo que se merecía estar con los mayores. Un fuerte tiro de Campabadal desde la frontal era un ejemplo de que hasta los laterales intentaban crear peligro.

Eso sí, el único gol llegó desde los once metros. Un inocente penalti de Miquel sobre Brandon provocó la primera gran alegría de la tarde. Arana, rasito y al centro, batió a Santamaría y marcó el primer gol de la temporada. Y otra buena noticia fue que el meta Timon demostró unos sensacionales reflejos prácticamente en la siguiente acción. Puso la manopla a un remate de Jebor que arrancó los aplausos del público. Y poco después Acuña no llegó a un gran centro del omnipresente Brandon.

La Ponferradina espabiló de verdad y el Mallorca lo pagó. Se retrasó unos metros y empezó a jugar con fuego, con ocasiones para Acorán y Melero. Además los locales estaban imprecisos a la hora de sacar el balón, algo que provocó algún susto. En la reanudación la dinámica fue parecida pero los bercianos daban mucho más miedo con la entrada al campo de Yuri, que ya advirtió en el 46 a Timon de que estaba ahí.

Hasta que los isleños se complicaron la vida de la forma más tonta. Protestaban que los visitantes no tiraran el balón cuando Pereira estaba en el suelo y Acuña, que necesita ponerse en forma, realizó una fuerte entrada sobre Casado quizá fruto de la frustración. La roja fue clara y el panorama del encuentro cambió radicalmente en el minuto 58 porque quedaba un mundo hasta el final. Pero hasta en eso el Mallorca sale reforzado. Supo defenderse con criterio, ayudado además por la entrada de Damià Sabater, que demostró que será importante. Aportó equilibrio y oxígeno a los suyos a pesar de su enorme juventud. Incluso mostró descaro tirando a puerta. Pero el balón era de la Ponferradina, que se estrelló ante Kasim, que fue de menos a más, y Aveldaño, y unos laterales que cumplieron. De hecho, un disparo de Casado, con una soberbia parada de Timon, fue lo más destacado del conjunto del técnico Díaz. El Mallorca resistió, incluso ya sin fuerzas, para llevarse una alegría que necesitaba. Ojalá sea la primera de muchas.

Iberostar Estadio (8.715 espectadores)

Real Mallorca: Timon, Campabadal, Kasim, Aveldaño, Joan Oriol, Yuste, Javi Ros (Damià Sabater, min. 51), Arana (Moutinho, min. 70), Pereira, Brandon (Company, min. 63) y Acuña.

Ponferradina: Santamaría, Seoane, Alan, Miquel, Casado, Andy (Basha, min. 54), Melero, Antón, Acorán, Jebor (Yuri, min. 46) y Berrocal (Jonathan, min. 73).

Goles: 1-0, m. 15: Arana marca de penalti con un tiro raso lanzado al centro de la portería defendida por Santamaría.

Árbitro: Ocón Arráiz (C. riojano).

Tarjetas amarillas: Joan Oriol (min. 12), Miquel (min. 15), Kasim (min. 42), Timon (min. 58),

Tarjetas rojas: Acuña (min. 58)

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