Un central, un centrocampista y un delantero, pero de los que están llamados a ser titulares indiscutibles en este Real Mallorca. Esto es lo que espera incorporar el club esta semana, como muy tarde el lunes a las 12 de la noche, justo cuando se cierre el mercado de fichajes, para apuntalar una plantilla diseñada para luchar por el ascenso. O eso es la idea que defiende desde el primer día el presidente Utz Claassen, el director deportivo Miquel Àngel Nadal y el entrenador Albert Ferrer, por mucho que el estreno liguero en Alcorcón (2-0) fuera un auténtico esperpento.
No es que la derrota haya cambiado los planes a la hora de fichar porque los rectores del club se han cansado de repetir que manejaban diversas opciones para reforzar la plantilla en las diferentes líneas, sobre todo porque el cierre del plazo les daba cierto margen. Sin embargo, después de la imagen ofrecida en Santo Domingo, el mallorquinismo también necesita ver todavía más caras nuevas para que el proyecto tenga una credibilidad que ahora se tambalea. Porque está claro que los doce fichajes no parecen suficientes para elevar el nivel de una plantilla a la que se le exige estar en la parte alta de la clasificación. Pero mejor ir por partes.
El Mallorca quiere otro central de garantías que acompañe al argentino Aveldaño, que debe ser el líder de la zaga. Tobias no convenció, ni de lejos, en su estreno y Hugo Gómes ni siquiera entró en la lista de convocados para el duelo frente a los alfareros. Truyols, que estaba lesionado, y Kasim, son los otros centrales de los que dispone el catalán, pero para el club no es suficiente.
En el centro del campo se antoja imprescindible contratar a un futbolista creativo, de los que hacen jugar a un equipo. Los bermellones se están mostrando muy planos a la hora de elaborar el juego y peligro. Ros no se ha mostrado como el futbolista que debe asumir esta función, al menos de momento, y Tià Sastre es muy joven para exigencias de este calibre. Yuste y Damià Sabater, además, gozan de toda la confianza, pero son de corte defensivo. La marcha de Marco Asensio ha dejado esa posición vacía en el plantel.
El Mallorca también quiere un ariete de referencia. De hecho, su llegada es indispensable. Solo Cedric y Carioca, que bajará al filial, son ´nueves´ natos, ya que Acuña y Coro, que deben ser importantes, son segundos delanteros. Un punta que asegure goles es vital y esta semana debe desembarcar en la isla. No queda otra. Hay demasiado en juego.
