El Real Mallorca celebró ayer por la tarde una Junta General Extraordinaria de Accionistas en la que debía aprobarse el presupuesto para el ejercicio 2015/16. La reunión no había terminado al cierre de esta edición, aunque no debía haber problemas porque los dos accionistas de referencia son Utz Claassen y su esposa, Annette. En todo caso, el club anunció con anterioridad a la Junta que no se iba a dar ningún tipo de información referente a las cantidades presupuestadas.

Asimismo, estaba previsto nombrar un auditor para evaluar las cuentas de los próximos tres ejercicios y elevar el listón de acciones para tener derecho a asistir a las Juntas de diez a 160 títulos. De este modo, los accionistas más minoritarios se quedarán fuera.