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Inquietud por Marco

Soler se marca como prioridad recuperar anímicamente al canterano y el club recurre su expulsión

Marco Asensio conduce la pelota en el partido del pasado sábado en el Nuevo Colombino. agencia lof

Las apariciones de Marco Asensio son la mejor arma del Real Mallorca para desequilibrar los partidos, pero las espacia cada vez más en el tiempo. El canterano es menos incisivo que nunca en el curso en el que debía explotar antes de irse al Real Madrid y el cuerpo técnico de Miquel Soler se ha marcado como prioridad recuperar anímicamente al mejor jugador que ha dado la cantera de Son Bibiloni en décadas.

Su deficiente actuación en el Nuevo Colombino fue la guinda a varias jornadas de declive futbolístico. Bien marcado por los adversarios cada vez que entraba en contacto con la pelota, no se le recuerda ni una sola acción de mérito contra la portería del Recreativo de Huelva.

También fue noticia su expulsión cuando a los 44 minutos vio la segunda tarjeta amarilla. Marco criticó por excesivamente rigurosa la decisión del colegiado del encuentro, pero lo cierto es que al canterano le faltaron reflejos y cabeza fría para evitar una tarjeta roja que dejó a su equipo en inferioridad numérica toda la segunda parte.

El Mallorca recurrirá para que el mejor futbolista de la plantilla esté a disposición de Miquel Soler el sábado ante Osasuna. Pero lo cierto es que el recurso tiene pocos visos de prosperar porque las dos amonestaciones parecieron claras y el Comité de Competición es reacio a desautorizar las decisiones arbitrales salvo en casos muy claros.

Soler se estrenó como técnico bermellón dando un serio toque de atención al mallorquín. "No puede empezar y acabar él la jugada porque al final dos o tres rivales basculan a esa zona y pierde muchos balones. Tiene que saber cuándo tiene que asociarse y cuándo arriesgar. Pero tiene que ser menos previsible. Porque hasta ahora o resuelve él o pierde la pelota", dijo el Nanu en la rueda de prensa previa al desplazamiento a Huelva.

La solución del técnico pasaba por incrustarle en la banda, pero el experimento acabó en fracaso. Desubicado y fuertemente vigilado por los rivales, Marco completó su peor partido con la camiseta bernellona.

El futbolista fue clave en la ya lejana racha de cinco victorias que encadenó el equipo en la primera vuelta. Por aquella época era el futbolista más destacado en los triunfos y en las derrotas, pero en las últimas jornadas se ha dejado ver muy poco.

El Real Madrid cederá la próxima temporada a Marco a un equipo de Primera para que continúe su progresión, pero hasta entonces Soler trabajará para cargar las pilas a un futbolista clave en su sistema pero que lleva tiempo estancado.

Clave en el engranaje rojillo

El catalán está convencido de que puede ofrecer un mayor rendimiento partiendo desde la banda, aunque con una cierta libertad de movimientos para acercarse a la punta de ataque.

El Mallorca espera al mejor Marco para abrir brecha con la zona de descenso y cerrar una permanencia sin apuros para que no se repita el drama de las últimas jornadas de la pasada temporada.

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