­El Wigan continúa su escalada económica para llevarse a Iván Ramis a la Premier League. El club inglés comunicó ayer al Real Mallorca una oferta de cinco millones de euros. La entidad isleña la sigue considerando insuficiente y en su nueva contestación se remitió a los seis millones que establece la cláusula del futbolista. Pero en el Mallorca ya nadie se lleva a engaño: la salida de Ramis es inminente.

La pelota ha vuelto al tejado del central pobler. Hace unos días renunció a un cinco por ciento del traspaso –sobre un quince por ciento– y si desistiera de cobrar toda la comisión el Mallorca flexibilizaría su posición.

El club insiste en cobrar los seis millones de euros porque se quedará mucho dinero por el camino. El cuarenta por ciento del traspaso se destina a Hacienda y otro veinte a los acreedores ordinarios del concurso. Si Ramis se quedara con un diez por ciento solo llegaría a la tesorería bermellona 1,8 millones de euros para fichar a un central que le sustituya. "No nos queda casi nada", afirmó contrariado Serra Ferrer hace unos días en Oosterbeek. Sería muy poco premio para mitigar la pérdida del futbolista más cotizado del vestuario y que es considerado una pieza básica en el esquema de Caparrós.

El jugador tiene la iniciativa

En cualquier caso, Serra Ferrer dictó entonces una sentencia que podría liberar a Ramis: "Si el jugador renuncia al quince por ciento que tiene por su venta y el Wigan llegan a cinco millones, quizá no hace falta que llegue a los seis", afirmó. El conjunto inglés ha alcanzado era cifra mágica y ahora todo puede depender del cotizado futbolista.

El vicepresidente deportivo tiene previsto viajar hoy a Holanda para ver en directo el amistoso que jugarán los hombres de Joaquín Caparrós ante el Feyenoord. Serra Ferrer y Ramis tendrán otra oportunidad para hablar cara a cara de la situación y es probable que se dé un nuevo paso para que el jugador abandone la disciplina bermellona. Cabe la posibilidad de que en dicho encuentro Ramis acepte renunciar a su comisión y se le abran las puertas de Son Moix.

´Mágico´ Díaz, agente del defensa, podría ser el último obstáculo que derribar. Ya ha demostrado que no está dispuesto a que su representado se olvide de lo que tiene firmado. En enero de 2010 se negó a un traspaso al Celtic de Glasgow escocés al no satisfacerle las cantidades que debían percibir por el pase.

Habrá que ver si el central juega hoy ante el Feneyoord. Caparrós le ubicó ayer en el equipo titular, pero hace tiempo que el jugador tiene la cabeza en Inglaterra y el técnico podría prescindir de él ahora que la solución al conflicto parece llegar a su final.

Lo cierto es que el Wigan está apostando fuerte por el central. Su primera propuesta, el 5 de julio, era de 2,5 millones de euros. El día 19 subió a 4,5 millones. Y ayer alcanzó los cinco. El club y el jugador, por su parte, ya tienen un principio de acuerdo en lo referente a su ficha.