El Real Mallorca da por perdido a Castro por culpa de las altas pretensiones económicas del zurdo, que todavía no ha confirmado su fichaje por la Real Sociedad. El centrocampista, que en septiembre cumplirá veintiocho años, quiere firmar el contrato de su vida exigiendo unas condiciones que en la planta noble de Son Moix no pueden alcanzar.

El director deportivo, Llorenç Serra Ferrer, contactó ayer con el representante del jugador, Daniel Delgado, ´segundo´ de Paco Casal, pero la propuesta no ha convencido al jugador. El Mallorca no quiere pagar la prima de fichaje, ya que queda libre el 30 de junio, que supera el millón de euros, ni está dispuesto a ofrecerle un contrato superior a las dos temporadas. En cambio, la Real Sociedad sí acepta las peticiones del uruguayo, con un contrato por cuatro temporadas. Los vascos sí abonarían esta prima de fichaje, pero en San Sebastián se especulaba que, más allá del 1,5 que se llevaría en cada una de las tres primeras campañas, en la cuarta recibiría esta prima €más de un millón€ como contraprestación y no ahora.

La Real Sociedad está a la espera del sí definitivo del sudamericano, que está de vacaciones en su país. De hecho, ha pasado unos días junto a su compatriota Ifrán, ariete de la Real Sociedad, en la localidad uruguaya de Cerro Chato. Es un futbolista que gusta al entrenador del conjunto donostiarra, el francés Philippe Montanier, que acaba de renovar una temporada más por la entidad guipuzcoana. Eso sí, al cierre de la edición de este periódico todavía no tenían la respuesta deseada. Castro trasladó, antes de marcharse a su país, al propio Serra Ferrer y al entrenador Joaquín Caparrós que tenía ganas de quedarse en la isla. Pero las posturas económicas, salvo milagro, están demasiado alejadas como para que haya un cambio repentino.

El todavía bermellón llegó en el verano de 2007 a Son Bibiloni procedente del Nacional de Montevideo, previo pago de 4,7 millones por su setenta por ciento, por lo que ha jugado cinco temporadas en el Mallorca con un rendimiento irregular. Solo Nunes, que ya ha renovado por una temporada con opción a otra, llevaba más tiempo en el vestuario que el extremo. Chori ha cerrado el curso con seis tantos, una cifra que iguala su mejor registro como bermellón, en la campaña 20009/2010.