­El Real Mallorca se plantea acudir a la justicia internacional para denunciar a la UEFA y obtener una compensación económica por la exclusión de la Liga Europa en verano de 2010. Los consejeros votarán si emprenden una batalla legal en el próximo Consejo de Administración, todavía sin fecha.

El respaldo de la Audiencia Provincial, que en un escrito del 5 de abril dio una victoria moral al Mallorca al reconocer que tenía derecho a jugar la competición europea, ha dado alas a la opción de batallar para reclamar una indemnización que el club ha cifrado provisionalmente en 1.450.000 euros –ingresos contabilizados para una hipotética primera fase– frente a unos gastos de 146.250. Esos beneficios saldrían de los derechos de televisión, esponsorización y taquillaje.

El Mallorca también podría reclamar una plaza en una futura edición de la Liga Europa, pero esta posibilidad es poco realista.

En cualquier caso, se lo pensará mucho la entidad bermellona antes de emprender una batalla judicial contra la UEFA. El proceso implicaría unos elevados costes y podría prolongarse durante años. Y además implicaría enfrentarse abiertamente con Michel Platini, uno de los hombres más poderosos del planeta fútbol y que fue implacable con los bermellones aquel verano de 2010.

Lo sabe el Sion. Un tribunal ordinario suizo dio la razón al club helvético en su litigio contra la UEFA, que había decretado su expulsión de la Liga Europa. El organismo presidido por Platini, no solo no acató la orden del tribunal de devolverle la plaza europea, sino que además le impuso una dura sanción económica y le impidió fichar jugadores por haber acudido a la justicia ordinaria. Por todo ello el Mallorca se lo pensará dos veces antes de arriesgarse a sufrir las represalias de Platini.

Lo que sí tiene claro el club es que no irá contra la Real Federación Española de Fútbol, que en primera instancia concedió las Licencia UEFA al Mallorca.

En 2010 el Mallorca emprendió una estrategia defensiva desastrosa. Trató de recurrir el veto enviando a Nyon –sede de la UEFA– a Javier Tebas, enemigo declarado de Platini. Luego renunció a pedir defensa al TAS. Y al final acudió a la justicia ordinaria con la victoria moral que le ha dado la Audiencia Provincial.