­No hay tranquilidad en el Real Mallorca. A 48 horas de un partido trascendental contra el Barcelona, hubo un cruce de acusaciones entre Llorenç Serra Ferrer y Utz Claassen, todavía a la greña a cuenta de la querella por presunta estafa que presentó el alemán en marzo y que fue inadmitida a trámite.

En su día el alemán presentó un recurso contra la inadmisión alegando que se había vulnerado su derecho de defensa. Mientras que Serra Ferrer y Jaume Cladera presentaron ayer un escrito de oposición contra ese escrito que califica de "retahíla de generalidades, de afirmaciones vagas, imprecisas y acreedoras de una censurable tendenciosidad".

Siguen los abogados de Serra Ferrer y Cladera, Eduardo Valdivia y Jaime Campaner, que Claassen "realiza un ejercicio hiperbólico de mala fe procesal y temeridad".

El contenido de este escrito, su interposición en un tribunal y su filtración a los medios encolerizó al alemán, que se apresuró a responder a través de su portavoz, Miguel Blum: "Hemos puesto dos recursos de reforma por aspectos inusuales del proceso. Este escrito es irregular porque los demandados [Serra y Cladera] no son parte del procedimientio desde que el juez inadmitió nuestra querella a trámite. Jamás se ha visto que personas que no sean parte del procedimiento puedan interponer escritos", dijo Blum. "Esto refleja el gran miedo de los demandados a que se haga una investigación ordinaria sobre la supuesta estafa", añadió.