El entrenador del Mallorca, Joaquín Caparrós, ha advertido hoy que el domingo en el estadio Anoeta de San Sebastián les espera un partido muy difícil, y ha subrayado: "Para ganar a la Real hay que estar al cien por cien".

"Aquí no vale estar al ochenta o al cincuenta por ciento, ya que será un partido igualado y muy exigente", ha subrayado Caparrós, quien ha destacado la dificultad que plantean los partidos en Anoeta.

"Ellos en casa son muy fuertes, le tienen cogida la medida a su estadio y la afición está entregada por completo a sus futbolistas y técnicos, por ello, será todo muy complicado", ha indicado.

Caparrós ha rehusado recordar los detalles del 4-0 ante el Villarreal la pasada jornada, en la que ha sido una de las mejores actuaciones del Mallorca de la temporada en su estadio.

"Lo que se hizo la pasada jornada es historia, y solo hay que mantener esa misma línea, pero en circunstancias y rival muy diferentes. Frente a la Real no podemos pensar en ese partido, ni los puntos que sumamos en la clasificación, ni en que les eliminamos de la Copa del Rey, en nada. Solo en el rival y prepararse para un encuentro muy disputado", ha señalado.

Caparrós ha insistido en los elogios a la Real Sociedad: "Juegan muy a gusto en casa y ante el Sevilla tuvieron que madurar el partido porque no fue fácil, pero parecía que sus jugadores tenían más experiencia, aunque son chicos que están creciendo, y lograron su objetivo", ha precisado.

El técnico mallorquinista ha adelantado que Chico tiene opciones de jugar el domingo, probablemente, en la banda derecha, ya que Martí Crespí, titular ante el Villarreal, sufre algunas dolencias físicas. En ese caso, Nunes y Ramis repetirían en el eje de la zaga".