Transcurridos más de veinticinco años desde que se iniciara la construcción del polígono de Santa Maria, en la finca de Son Llaüt, éste ha sido recepcionado por parte del consistorio una vez finalizadas las obras pendientes de electrificación, la adecuación de las zonas verdes y viarias que permitieran a los propietarios de las naves y solares la regularización total de su situación. Este precepto legal ha sido posible gracias a la ejecución de los avales bancarios, depositados en su día por la empresa constructora por un importe de 720.000 euros.

El acto oficial de recepción por parte del consistorio tuvo lugar en el salón de plenos. Nicolau Canyelles, alcalde de la localidad, firmó el acta de recepción de las obras, agradeciendo a los empresarios su paciencia y añadió: "Con esta legalización y la propia construcción del vial de acceso, desde la autopista al polígono, éste ganará en competividad y será una buena fuente de promoción económica para el municipio".

Por su parte, el presidente de la junta de compensación del polígono, Eugenio Molina, mostró su satisfacción "pues tras tantos años y esfuerzos hemos conseguido llegar a esta situación".

Quiebra

Hace aproximadamente veinticinco años, la empresa Polígono de Santa Maria S.A., perteneciente al grupo Drac, inició las obras de construcción de la zona industrial de Santa Maria, ubicada en la finca de Son Llaüt. En el año 2008 la quiebra económica del grupo Drac llevó a la posterior liquidación de la empresa promotora Polígono de Santa Maria S. A., dejando las obras de las instalaciones y servicios que eran de su incumbencia sin finalizar. Esa circunstancia impedía la recepción por parte del consistorio del polígono.

Los propietarios de solares optaron por realizar las obras que faltaban por su cuenta a fin de facilitar la recepción del mismo por parte del consistorio. Al mismo tiempo, la alcaldesa de la localidad Rosa Vich interpuso un contencioso en nombre del Ayuntamiento contra la entidad bancaria avalista de las obras para poder ejecutar los avales depositados en su día, ya que el consistorio y la entidad bancaria tenían distintos puntos de vista sobre la ejecución de los mismos. La justicia dio la razón al Ayuntamiento y la entidad bancaria tuvo que depositar la cantidad avalada. A raíz de esta sentencia, en el año 2015, el consistorio tomó la iniciativa y acometió la finalización de las obras que faltaban, como la conexión eléctrica definitiva que Endesa llevó a cabo en 2017, y se iniciaron las obras de acondicionamiento final de zonas verdes, aceras y asfalto.