La que fue durante décadas la escuela de educación infantil de Sa Torre, poco a poco se reconvertirá en un colegio de primaria. El paso inicial será en septiembre, cuando pasará a formar parte de las escuelas públicas de Manacor que imparten los cursos previos al instituto. Esta ampliación de la oferta se llevará a cabo de manera paulatina, con lo que durante el curso 2018-2019 comenzarán las clases de una línea de primero de primaria, el curso 2019-2020 las de segundo y así sucesivamente hasta sexto.
Hasta ahora la mayor parte de los alumnos que a los seis años salían de Sa Torre, comenzaban la educación primaria en las aulas del colegio Simó Ballester, que también está previsto que amplíe su capacidad con el edificio situado donde estaba el antiguo cuartel militar, que pasará a ser su cantera infantil.
Sa Torre fue primer instituto público de secundaria de Manacor. Inaugurado durante la guerra civil, en 1937, como instituto Ramon Llull, el edificio ocupa buena parte del que fuera recinto defensivo rural de ses Puntes (siglo XIV), del que solo queda una de las torres y de donde recoge el nombre, también topónimo del barrio. Hoy en día, una placa en su entrada de la calle del Rosselló todavía recuerda su propósito: "En este edificio profesores, Ayuntamiento y ciudad hicieron posible nutridas promociones de bachilleres. 1937-1970".
Heredero del colegio del mismo nombre inaugurado en 1876 como punto privado de "enseñanza cultural" (administrado por una junta de abogados, médicos y religiosos), no fue hasta el siglo XX cuando se constituyó como una sede del instituto Ramon Llull de Palma, de donde vinieron los primeros profesores (tres de letras y tres de ciencias). No fue hasta la construcción del IES Mossèn Alcover y el posterior instituto de Na Camel·la, cuando el viejo Sa Torre pudo jubilarse.
Tras años a la deriva, donde fue desde la Escola de Mallorquí, el local de ensayo de la Banda Municipal, o un centro de examen de solfeo etc, fue rehabilitado como centro de educación infantil con un alumnado que siempre ha rondado los 150 niños.
Sin embargo en marzo de 2011 la propia conselleria de Educación anunciaba el cierre de Sa Torre, para que los escolares pasaran a formar parte del Simó Ballester una vez concluidas las obras del edificio de Els Sementals. Pero el retraso de los trabajos y sus consecuentes problemas burocráticos, unidos a la negativa de los padres a abandonar el viejo centro (que una vez municipal iba a transformarse en casal juvenil), echaron abajo los planes iniciales.
Durante todos estos años Sa Torre se ha convertido también en un referente en la integración de alumnos de distintas nacionalidades, muchos de ellos procedentes de Marruecos. En 2010 un estudio reveló que tanto el Simó Ballester como Sa Torre superaban la ratio del 40% de inmigrantes en aulas. Lo que derivó en una serie de medidas correctivas de reparto del alumnado.
