Montuïri, Petra, Algaida, Alcúdia, sa Pobla, Campanet y Manacor, entre otros municipios, vivieron ayer, un año más, sus típicas jornadas de pancaritats y salidas de los salers (jóvenes quintos).

En Montuïri, a las nueve de la mañana, como es tradición, el alcalde oficial entregó la vara al batle des Puig, el músico Joan Mesquida Pocoví. Este nombramiento reconoce la labor de una persona que haya destacado por su labor y dedicación a Montuïri y ejerce el cargo de forma honorífica durante el pancaritat montuïrer del martes de Pascua. A continuación, la comitiva -encabezada por la banda de música y el "alcalde por un día"- inició su recorrido por la calle Major hasta el Pou des Dau desde donde los romeros marcharon los cuatro kilómetros a pie por el Camí Vell hasta el Puig de Sant Miquel.

En la cima, comieron las últimas panades i rubiols y tuvo lugar la final del XXIII campeonato local de tella en el que intervinieron los diez clasificados en la fase previa celebrada el Sábado Santo y que había registrado la participación de 38 jugadores. A las once, tuvo lugar la misa de la Mare de la Bona Pau en la ermita y luego, los bailes mallorquines al compás de la banda de música. A mediodía la agrupación local de Protección Civil organizó una paella benéfica en la explanada del montículo. Tras la comida, se organizó ball de bot y la Agrupació Zero-Tres coordinó una demostración de danza moderna y el grupo Indigests ofreció un concierto. Los ganadores del campeonato de tella fueron Guillem Nicolau Pizá, Jaume Garau y Miquel Tous.

Los vecinos de Alcúdia celebraron el pancaritat de la Victòria, en la ermita del mismo nombre. Allí asistieron a la eucaristía celebrada por el párroco local, Jordi Gayá. Tras el oficio religioso los congregados pudieron adquirir tiquets con que degustar una paella elaborada por miembros de la Obreria Amics de la Victòria.

En sa Pobla, a las nueve de la mañana se escucharon los sonidos de las campanas de la Iglesia de Sant Antoni Abat, símbolo sonoro que daba comienzo a la tradicional pancaritat de Crestatx.

La imagen de Santa Margalida, patrona de la localidad, amanecía engalanada para que los barratiners y los vecinos que los acompañaron, la trasladaran en romería. El Ayuntamiento dispuso un servicio de autocares para ir hacía la Ermita, por un euro.

Mientras algunos caminaban hacía Crestatx, otros ya estaban allí preparando todas las mesas y el fondo para hacer el tradicional arròs brut.

Campanet llevó a cabo la baixada del Sant Crist hasta la antigua iglesia de Sant Miquel(S. XlV) con una gran multitud de vecinos. A las 10, los devotos al son dels xeremiers, emprendieron el recorrido que tiene lugar desde hace varios siglos el martes de Pascua según el acuerdo que en su día se adoptó al trasladar la parroquia al pueblo actual. El obispo de Mallorca Sebastià Taltavull , participó en la procesión como un peregrino más. Después presidió la eucaristía. Tras la celebración y en la explanada hubo trencada d'olles para los más pequeños, bailes populares y una arrossada. Finalmente, por la tarde los quintos, emprendieron la hazaña de ascender al pino enjabonado que se había colocado el día anterior.

En el Puig de Bonany, en el municipio de Petra, se registró mucha participación en el pancaritat. Los vecinos de Petra, Vilafranca, Sant Joan y Ariany, principalmente, celebraron la tercera fiesta de Pascua y aprovecharon, como no, para comer las últimas panades, rubiols i crespells de estas fiestas. Desde primera hora de la mañana los marxaires se concentraron en el Peu del Bon Jesús para iniciar la subida a pie. A las 11.30, misa con la tradicional bendición de laurel. La convocatoria popular contó a su vez con fiesta infantil a cargo de Sapaghetti y el puesto de comida de los quintos de 1998.

En la comarca del Llevant, destacar el protagonismo de diferentes grupos de salers de Manacor, Son Macià y Porto Cristo.