Tres gatos de la colonia controlada de la urbanización del Vilar de Pollença se encuentran hospitalizados en clínicas veterinarias a causa de disparos. Fuentes de la organización Cat Protection Pollença señalan que "han desaparecido otros tres felinos que suponemos que habrán sido abatidos".

Coloma Jaume, es la portavoz de Cat Protection Pollença. Destaca que "en el Vilar existe una colonia de gatos controlada. Una voluntaria lleva tiempo encargándose de que los animales que la integren sean castrados y convenientemente vacunados y tratados sanitariamente".

Los responsables se apercibieron hace unos días que algunos animales estaban heridos. Fueron recogidos y trasladados a clínicas veterinarias donde alguno ha sido diagnosticado como grave.

Carabina

Dichos responsables relatan que "tras la primera impresión -corroborada posteriormente radiografías- se trata de perdigones disparados con alguna carabina de aire comprimido". Estos cuidadores han puesto los hechos en conocimiento de la Policía Local de Pollença.

Coloma Jaume asegura sentirse "perpleja ante la actuación del responsable de estos hechos, pues se trata de animales que no causan daños, al contrario, sirven para tener control sobre los roedores". Según explica la responsable de la ONG, "los gatos no solo desplazan a los roedores por su acción depredadora sino que con su simple olor hacen que estos busquen lugares más alejados".

Manifiesta además que "de dicho lugar solo se ha tenido una queja de un vecino, que no parece tener que ver con el asunto, pero que sirve como ejemplo para ver que no molestan".

Chorro de agua

Agrega que "este vecino se quejaba de que iban a hacer sus necesidades a su huerto y le causaban daños. Tras visitarle se le colocó un sistema detector del movimiento que dispara unos chorros de agua. De esta forma ahuyenta a los gatos con un inocuo remojón".

El Ayuntamiento colabora con la entidad mencionada dando ayudas para castrar a los gatos y de esta forma evitar la proliferación indiscriminada.