El Pi de Sant Llorenç, en la oposición del Ayuntamiento, informó ayer de que recientemente se celebró un pleno en el que se aprobó una propuesta de resolución suya para instar al Govern a realizar un cambio legal que permita ampliar y finalizar las viviendas legales en suelo rústico en parcelas inferiores a 14.000 metros (esta moción de los regionalistas es elevada a los plenos de prácticamente todos los consistorios de Mallorca).

El alcalde, Mateu Puigròs (GISCa), "en el mismo pleno presentó por vía de urgencia, fuera del orden del día y por lo tanto, sin posibilidad de debatir en la comisión informativa, la cesión de un solar que ha comprado el Ayuntamiento a la conselleria de Educación para ampliar la escuela de Son Carrió", detalló ayer El Pi.

Por ello, los regionalistas afirman que "el comité local de El Pi es consciente de la necesidad de reformar las instalaciones educativas del pueblo, construidas durante la II República, y ahora tienen tres barracones modulares en el patio". La media de alumnos del centro "hasta 2012 era de 80 alumnos, ahora es de 170".

Críticas por "falta de consenso"

El Pi advierte de que Son Carrió tiene unas normas urbanísticas "extremadamente restrictivas" y "vemos cómo el equipo de gobierno con la complicidad del Govern pretende construir un megacentro que sobrepasa exageradamente las necesidades". En esta línea, los regionalistas denuncian la "falta de consenso". "Queremos un centro sostenible, moderno, integrado, adaptado a las necesidades reales", sentencian.