La asociación de vecinos de Crist Rei de Inca, el mayor de los barrios de la ciudad, con unos 8.000 habitantes, pasa por momentos críticos. La junta directiva ha amenazado al Ayuntamiento de la ciudad con su dimisión en bloque si no aumenta la subvención para organizar las fiestas populares o las asume el consistorio.

El alcalde de Inca, Virgilio Moreno ha contestado que necesita estudiar la situación. El alcalde ha pedido un lapso de quince días para tomar una decisión.

El problema de la entidad vecinal, que por otra parte es la más antigua de las asociaciones de vecinos de Inca, es puramente económico. Fuentes de la junta directiva señalan que "el Ayuntamiento de Inca otorga cada año una subvención de 2.500 euros que sólo cubre, como mucho, el 50% del coste de las fiestas. La asociación debe completar con las cuotas de los socios el resto, hasta los 5.000 ó 6.000 euros que cuestan". Las mismas fuentes indican que esto hace que todo el presupuesto se "funda" en las fiestas y que la entidad "no pueda desarrollar otras actividades".

Los responsables de la asociación señalan que "no hay proporcionalidad en las subvenciones pues otros barrios mucho más pequeños reciben el total de lo que les cuestan sus fiestas".

Fiestas populares

La junta directiva dimitirá en pleno si el Ayuntamiento no asume las fiestas o aumenta la asignación. Las fuentes citadas sostienen: "No vamos a ser la primera junta directiva que elimine la tradición de las fiestas populares. Antes dimitimos y que el Ayuntamiento lo explique a los vecinos".

La asociación se encuentra paralizada en estos momentos y a la espera de respuesta. No se han cobrado las cuotas anuales.