La futura escuela pública de Caimari (Selva) se podrá construir en el solar municipal de ses Deveres. La presidenta del Govern balear, Francina Armengol, lo anunció esta mañana tras explicar que el Consell de Govern ha aprobado una declaración de Interés Autonómico de este equipamiento educativo. De este modo, "el Ayuntamiento podrá ceder el solar ya con un uso educativo y se podrá agilizar el proyecto", ha explicado Armengol.

La presidenta ha destacado que esta escuela es una "necesidad urgente" y reconoció el trabajo de la comunidad educativa, "que durante muchos años ha tenido que esperar, de manera injusta, a que se pudiera empezar a construir esta escuela".

Por su parte, el conseller de Educación, Martí March, ha explicado que se tratará de una escuela de una sola línea, con tres unidades de infantil y seis de primaria, además de los servicios complementarios, como el comedor, biblioteca o gimnasio.

Caimari cuenta actualmente con 73 alumnos que estudian en cinco unidades educativas. El aumento del número de alumnos durante los últimos años obligó a trasladar las clases a un espacio mayor. Por eso, a finales del año pasado, se hizo el cambio provisional de la vieja escuela al edificio de Ca ses Monges.

Desde hace años, la comunidad educativa del municipio reclama la construcción de una nueva escuela, pero la falta de planeamiento municipal ha dificultado el contar con unos terrenos adecuados para el nuevo equipamiento. La única parcela de titularidad municipal en suelo rústico que cumple las condiciones es la de ses Deveres, que cuenta con una superficie útil de 5.250 metros cuadrados.

El Plan Territorial de Mallorca impedía que pudiera obtener la declaración de interés general, puesto que esta norma limita la posibilidad de ubicar usos docentes en suelo rústico sólo en las llamadas áreas de transición.

Joan Rotger, portavoz municipal del PP (en la oposición) recordó ayer que esa fue la primera opción barajada y que entonces no fue posible por lo que se tuvieron que buscar otros solares. Joan Sastre, alcalde de Selva, explicó que "ses Deveres es el mejor solar puesto que se encuentra junto al polideportivo, cuenta con los servicios básicos y, además, dispone de una ruta segura para que los niños acudan a pie".

El nuevo colegio tendrá una capacidad para 240 alumnos. El primer paso después de la declaración de interés autonómico es la redacción del proyecto básico que se consensuará con la comunidad educativa, después el final y la licitación.

Se ha calculado un montante de aproximadamente 2,4 millones de coste. Las obras deberían empezar a finales de este año o principios de 2019. Martí March explicó que la idea es que se construya en un año por lo que "como mucho pueda entrar en funcionamiento en 2021".