Conocida como 'La obra más montuïrera de todos los tiempos', Sant Antoni al Viu volvió de nuevo a los escenarios cuatro décadas después de que Antònia Mateu la dirigiera por última vez, en un espectacular montaje en la plaza Major el 25 febrero 1979 con motivo de los Darrers DiesDarrers Dies de Montuïri.
En esta nueva ocasión fue este miércoles, festividad del santo de Viana, cuando el grupo Mont-lliri efectuó una lectura dramatizada en Cas Retratista, local que se estrenó para representaciones y que es también conocido como Cas Confiter (y que el fotógrafo montuïrer Gaizka Taro ha renovado recientemente).
El investigador y profesor de la UIB, Joan Miralles i Monserrat, glosó el contenido y valor de la composición montuïrera de literatura popular y comentó e intervino en las escenas a medida de que estas iban desarrollándose. Gaizka Taro diseñó un magnifico audiovisual cuyas imágenes iban ilustrando las intervenciones de los siete artistas, Guillem Morlà, Cati Ferrer, Jaume Ramonell, Pep Toni Gomila, Xisco Ramis y Joana Tugores.
Creada en 1875
Sant Antoni al viu fue creada alrededor de 1875, hace 143 años. Esta pieza teatral se representó el día de Sant Antoni Abat (de Viana, de Gener o del Animals) aproximadamente en 1920 y, en la década de los 70 del siglo pasado, volvió de nuevo bajo la dirección de Antònia Mateu. Los autores de la obra fueron Sebastià Amengual Capçana y Bartomeu Bauçà CapçanaPelut. El primero, nacido el 22 de enero de 1838, fue tejedor y nunca había ido a la escuela y murió a los 77 años. El segundo, payés nacido el 16 de enero de 1860, también era analfabeto y falleció en 1941.
Con motivo de aquellas celebraciones de la fiesta de Sant Antoni, después del oficio del Santo, tenía lugar la encolcada en la que intervenían tres glosadors. Estas tres personas seguían un itinerario por la villa montados en mulos ensillados. Después de la comida en la casa rectoral, se repartían las calles del pueblo en tres zonas y cada glosador estaba acompañado de un obrer que llevaba una bandeja para recoger las aportaciones económicas. De esta manera, tres comitivas recorrían el casco urbano y paraban de casa en casa donde glosaban, según las características de sus moradores. La fiesta concluía con una cena en la casa del obrer a base de sopas y frito. Después de la encolcada se llevaba a cabo la representación de Sant Antoni al Viu delante de la casa consistorial antigua. La palestra de Sant Antoni estaba delante y, algo más lejos, la barraca de Sant Pau (su compañero y anciano ermitaño).
Los actores
Los actores que intervenían representaban a Sant Ant0ni, Sant Pau, la Reina, Sant Miquel, dos damas, una cazador, un marinero, ermitaños, el Diablo, algunos dimonions, un monstruo y dos leones. Miralles i Monserrat explica que nació a partir de los sermones que el predicador impartía en torno a la novena de Sant Antoni. Se narraban historias relacionadas con el Santo desde las noche del día posterior a la festividad de Reyes hasta el día 16 de enero, noche anterior al patrón de los animales en que se cantaban Completes.
