Desde la pasada noche de Reyes en Artà no se habla de otra cosa. Y el joven que representará al Dimoni en las fiestas de Sant Antoni se ha convertido en principal protagonista involuntario de esos comentarios por una imagen que ha causado una gran polémica entre la sociedad local.

Según reconoció anoche a este diario el propio joven, publicó por error una imagen de carácter íntimo en la red social Instagram. Y, al darse cuenta del error, la borró inmediatamente. Pero entonces ya fue demasiado tarde. Alguien la había copiado con mayor velocidad en ese medio de comunicación masivo de fotografías. La imagen pasó la víspera de Reyes de móvil a móvil y se convirtió en el tema más comentado en el pueblo, justamente cuando las fiestas de Sant Antoni han otorgado al que será su próximo Dimoni la máxima notoriedad y protagonismo. Y además lo hará sucediendo a su padre, protagonista de las fiestas después de veinte años.

El propio padre del joven también se puso en contacto con este diario anoche para intentar detener a toda costa la publicación de la foto.

La imagen ya había sido editada inmediatamente en la edición digital del diario a media tarde, cuando una tía del joven denunció que la polémica fotografía había sido conseguida por medios ilícitos y que al joven le habían sustraído el móvil para hacerle daño, cosa que después desmintió el propio interesado en la versión que ofreció.

En Artà las consecuencias son imparables, así como los comentarios que circulan. Se han empezado a distribuir por la red vídeos y fotomontajes de todo tipo sobre dicha instantánea. En un vídeomontaje, se dobla el audio de unas imágenes del presidente de los EEUU Donald Trump en plena campaña presidencial americana, donde se halla sosteniendo a un niño en brazos, al tiempo que le pregunta si sabe quién tiene los atributos más grandes de la comarca, a lo que el niño responde: el Dimoni de Artà. También circula otro fotomontaje de la cuenta atrás para la fiesta de Sant Antoni al que al dimoni le han puesto la careta y una frase: Falten 10 dies, sin la vocal "i", sustituida por un miembro viril, lo que ha despertado todo tipo de bromas.