Panorama dantesco el que se ha encontrado hoy por la mañana el propietario de un rebaño de ovejas en una finca del Camí del Garrover de Inca, ubicada en el entorno del Puig de Santa Magdalena de la capital del Raiguer. Cinco perros de raza 'boxer' que residen en una vivienda anexa a la finca han matado prácticamente a todo un rebaño de ovejas. El resultado ha sido de ocho ovejas muertas y otras tres heridas de gravedad en el cuello y otros cuatro corderos también muertos por los canes. Pau Fiol, el hombre que cuida la explotación ganadera, propiedad de Miquel Martorell de Búger, explica que los animales que han resultado heridos deberán ser sacrificados.
Fiol ha interpuesto la correspondiente denuncia ante la Guardia Civil, que esta mañana se ha desplazado hasta la finca para abrir un atestado. Está previsto que mañana visite la finca un veterinario para elaborar un informe pericial. Más que del valor económico del ganado, Fiol habla de "valor sentimental", porque además algunas de las ovejas estaban embarazadas y a punto de parir. En principio, el propietario de los perros habría asegurado al ganadero afectado que se hará cargo del coste de la matanza para evitar que los perros sean sacrificados, aunque Fiol avisa que si el dueño de los canes no está de acuerdo con la valoración pericial, seguirá adelante con la denuncia contra él.
