El sábado 13 de enero tendrá lugar en el Casal de Cultura de Maria de la Salut el relevo en la alcaldía. Guillem Jordà (Més per Maria) sustituirá en el cargo a Biel Mas (El Pi), de acuerdo con el pacto firmado por estos dos partidos y el PSOE, que renunció a la alcaldía. Mas ha ocupado el cargo desde julio de 2016 y Jordà está previsto que agote la legislatura.

La legislatura, que comenzó en mayo de 2015 con Toni Mulet (PP) gobernando en minoría, ya que solo contaba con cinco concejales frente a los seis de la oposición conformada por El Pi, PSOE y Més, que tenían dos cada uno, resultó muy movida y agitada. Mulet se quejaba continuamente de la inestabilidad política que había en el Consistorio y del bloqueo, por parte de los tres grupos de la oposición, de todas las medidas que se querían sacar adelante desde el equipo de gobierno, que no pudo aprobar los presupuestos. Incluso tuvo un capítulo de fuertes discrepancias con la policía municipal.

Estos hechos generaron un clima de malestar dentro del Ayuntamiento. Los tres grupos de la oposición alegaban que eran muchas cosas las que no funcionaban. "La situación es insostenible y el PP en minoría no puede gobernar, ya que no es capaz de consensuar nada; nunca podemos llegar a un acuerdo".

La denegación definitiva de las normas subsidiarias por parte de la comisión insular de Ordenación del Territorio y Urbanismo del Consell debido principalmente a los convenios de urbanización del Clot d'en Maiol y los terrenos que se pretendían recalificar como suelo industrial, fue la gota que colmó el vaso.

Se empezó a gestionar una moción de censura que se demoró durante unas semanas debido a una crisis que tuvo el partido ecosoberanista. Todo se precipitó y Mulet presentó su dimisión antes de que se le desalojara con la moción de censura. Los términos que tenían que utilizarse para pactar la moción sirvieron para sellar un pacto de legislatura que de momento ha funcionado bastante bien y en el que parece que no hay fisuras.