El ayuntamiento de Fornalutx adquirirá tres desfibriladores que serán instalados en varios puntos del casco urbano, con el fin de mejorar la seguridad de vecinos y visitantes del municipio. El plenario celebrado la semana pasada aprobó la propuesta del equipo de gobierno para financiar la adquisición de estos dispositivos, que se hará a través de una operación de renting.

Según ha informado el propio Ayuntamiento, los nuevos equipos de reanimación cardíaca se colocarán en la escuela pública de Sa Rutlana, en el acceso a la biblioteca municipal y al local de la Tercera Edad, así como en el casal de Can Xoroi.

Estos tres nuevos dispositivos se añadirán a los dos que actualmente ya tiene en servicio el pueblo de Fornalutx en el centro de salud y en las dependencias de la Policía Local. “El objetivo es que Fornalutx sea un pueblo cardioprotegido”, ha afirmado el alcalde, Antoni Aguiló para argumentar la propuesta.

En otro orden de cosas, el grupo municipal del PSOE ha presentado una moción para pedir que la calle de Sa Font sea de un único sentido de circulación.