Sorpresa en el municipio de Algaida. El PSOE, que gobierna en minoría y es dirigido por la alcaldesa Maria Antònia Mulet, no consiguió en el pleno celebrado anteayer aprobar el presupuesto municipal de 2018. La propuesta elevada a debate ascendía a 3,8 millones de euros.

Tanto Més como PP, partidos de la oposición, comunicaron ayer sus argumentos para justificar su rechazo a las cuentas confeccionadas por los socialistas.

El PP, liderado por Rafel Oliver, recrimina a Mulet "que no haya sido capaz de consensuar los presupuestos de 2018 con la oposición para, de este modo, poderlos aprobar; con lo que tendrá que prorrogar los de este año".

En esta línea, Oliver incide en que "es una grave irresponsabilidad por parte de la alcaldesa y de los suyos. Pese a gobernar en minoría, su parálisis y desgana es ya alarmante".

Asimismo, el PP reprocha "el intento" de los socialistas "de aprobar unos presupuestos que lo único que contemplan es una subida de 355.000 euros debido a la subida encubierta del Impuesto de Bienes Inmuebles". Oliver también lamenta que este año "se han dejado perder subvenciones".

"Sin ningun tipo de consenso"

Més per Algaida, Pina i Randa, formación encabezada por Tomeu Ballester, afirma que su no al presupuesto obedece a que las cuentas previstas "son continuistas y no presentan ninguna línea política nueva". Según los ecosoberanistas, "necesitamos iniciativas valientes en promoción económica, turismo, urbanismo, etc.". Además, las cuentas "se han redactado sin ningún tipo de consenso, dejando así al margen a más de la mitad de los votantes del municipio". Por ello, Més advierte que "muestran la falta de sentido de la realidad del PSOE", si bien ofrece su colaboración.