La conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca presentó ayer en el municipio de sa Pobla el nuevo contrato de conservación y mantenimiento de los torrentes de Balears, que supondrá una inversión de 2,4 millones de euros hasta el año 2019. Las tareas derivadas del contrato ya han empezado a ejecutarse en los torrentes de sa Pobla y Muro y en el Torrent Gros de Palma.

El conseller Vicenç Vidal indicó que la iniciativa ambiental significará la limpieza de unos 500 kilómetros de torrentes en los próximos dos años, además de las obras de mantenimiento necesarias, ya que las obras de reconstrucción de muros se licitan de forma independiente y no se incluyen en el pliego de este contrato.

El contrato se divide en cinco lotes presupuestados en 484.000 euros cada uno. Así, la isla de Mallorca se divide en los lotes correspondientes a las comarcas de Tramuntana, centro y Llevant. En la isla mayor se intervendrá en 284,32 kilómetros de torrentes por un valor de 684.680 euros en tareas de limpieza y otros 515.320 euros en obras. Las empresas adjudicatarias del servicio son Elsamex y Amer e Hijos.

Los otros dos lotes se refieren a Menorca, donde se actuará en 109,59 kilómetros, y Eivissa, con 117,44 kilómetros de torrentes pendientes de mantenimiento.

El conseller visitó ayer los trabajos que se han iniciado en el torrent de Vinagrella, entre sa Pobla y Muro, acompañado por el alcalde 'pobler' Biel Ferragut y el regidor de Medio Ambiente de Muro, Toni Serra, quienes destacaron la importancia de esta iniciativa para sus respectivos municipios.

Los trabajos consisten, por una parte, en el desbroce de la vegetación, la tala y la poda de árboles, además de la retirada de material acumulado, vertidos sólidos, obstrucciones y especies invasoras. Por otra parte, también se actuará en la reparación de muros y 'marges' que están en mal estado, en la protección de los taludes y la demolición de estructuras que afectan al dominio público hidráulico, además de la rectificación de cursos de agua.

Por razones de seguridad, la Conselleria ha priorizado las actuaciones en torrentes ubicados en suelo rústico próximos a núcleos urbanos, en cruces de carreteras y puentes y en zonas con curvas cerradas. El conseller apuntó que "el objetivo es recuperar un ciclo de limpieza para que la situación de los puntos negros de los torrentes sea óptima dentro de unos años".