El Municipio homenajeó a sus mayores: Francisco Vallori Espases, como el mayor del pueblo con 98 años; el matrimonio formado por Mateu Roig y Margarita Fiol, con 65 años de convivencia; y la centenaria Margalida Sureda Isern, que imprimió su mano en una baldosa de cerámica, la cual se colocara en un monolito junto al campo de fútbol donde figuran los nombres de los centenarios y su correspondiente baldosa en el suelo del mismo.