La alcaldesa de Manacor, Catalina Riera y la consellera insular de Territorio e Infraestructuras, Mercedes Garrido, firmaron ayer el convenio mediante el cual el Ayuntamiento cede a la Agencia de Defensa del Territorio (ADT) el control de la disciplina urbanística en el suelo rústico y los espacios naturales del municipio, así como la tramitación de los futuros expedientes de infracción. Sin embargo, "los expedientes de infracción urbanística en zona rústica que estén pendientes de resolver acabarán de tramitarse desde el departamento de Urbanismo", aclararon los técnicos municipales.

La concejala de Urbanismo, Isabel Febrer (El Pi), explica que "por una cuestión de responsabilidad con la protección del territorio y para cumplir con la legalidad urbanística, hemos defendido la cesión de estas competencias al Consell". Además, "la resolución de los expedientes de infracción conlleva una tramitación y un trabajo de seguimiento muy larga y la ley de control de gasto no nos permite contratar personal en el departamento. Por eso estamos seguros de que la adhesión a la ADT es una de las mejores soluciones para poder cumplir de manera eficaz con la legalidad urbanística", ha explicado la alcaldesa, Catalina Riera. Cabe recordar que la cesión de las competencias se aprobó en el pleno del mes de septiembre por unanimidad.