La Ley de Caminos Públicos y Rutas de Interés Excursionista que el Consell de Mallorca aprobó hace dos semanas contempla la expropiación de las parcelas privadas que componen los antiguos trazados ferroviarios de la estación de Consell a Alaró y de Llucmajor a s'Arenal, que la institución insular quiere reconvertir en vías verdes para el uso ciudadano con características similares a la ya existente entre Manacor y Artà sobre las vías del tren.
El texto legislativo recoge como una disposición adicional la creación de los dos caminos ferroviarios a través del Plan Sectorial de Caminos, que permite "analizar" los trazados de las antiguas líneas ferroviarias desafectadas y proponer la restauración y la puesta en funcionamiento de estos caminos para el uso público.
Por este motivo, la misma ley declara de "utilidad pública" los dos trazados ferroviarios, considerados de interés general, lo que permite la aplicación de la ley de expropiación forzosa.
En este sentido, el director insular de Territorio y Paisaje, Miquel Vadell, explica que el hecho de que ambos caminos ferroviarios estén declarados como de utilidad pública permite avanzar la tramitación para una posible expropiación de los trazados sin tener que esperar la redacción de un instrumento de planeamiento urbanístico, por lo que su desarrollo es suficiente con un proyecto de obra. Se trata de tramos desafectados de propiedad privada que pertenecen a múltiples propietarios, aunque en el caso de Alaró-Consell la construcción de la vía fue una iniciativa privada para facilitar la comunicación con las minas de lignito, por lo que la mayor parte del trazado ferroviario todavía pertenece a los antiguos propietarios de las minas y no se produce una dispersión importante de la propiedad.
Un coste "asumible"
De momento, se desconoce la institución que se encargará de ejecutar las expropiaciones, aunque probablemente sea Serveis Ferroviaris de Mallorca. Vadell afirma que "se trata de suelo rústico y el coste económico, todavía no calculado, no será muy elevado, es asumible". Lo que está claro es que será una administración supramunicipal la que lidere la iniciativa para evitar conflictos entre los municipios.
En el caso del camino ferroviario entre Llucmajor y S'Arenal deberán expropiarse 19.635 metros cuadrados, mientras que en el del camino de Consell-Alaró todavía no se ha calculado, aunque la superficie "será mucho menor".
La intención de la ley aprobada por el Consell es revalorizar los antiguos caminos que conectaban los diferentes municipios de la isla para ampliar las rutas excursionistas no motorizadas más allá de la Serra de Tramuntana para añadir un nuevo valor desestacionalizador a la isla.
En el caso de los caminos ferroviarios, son de las pocas rutas que se conservan sin asfaltar. Además, "son muy interesantes desde el punto de vista patrimonial, y especialmente el trazado entre Llucmajor y S'Arenal, en el que se conservan elementos de gran valor como el 'pont de les set boques'," apunta el director insular.
La "gran aceptación" que tiene la Via Verda entre Manacor y Artà ha animado al Consell a exportar este modelo a los dos caminos ferroviarios citados. No obstante, la ley precisa que la recuperación de los trazados no impedirá en un futuro el posible regreso del tren sobre las antiguas líneas.
