La pequeña localidad de Caimari (Selva) ha recibido este domingo una avalancha de visitantes con motivo de la vigésima edición de la Fira de s´Oliva, uno de los eventos populares del otoño mallorquín más queridos por el público por la belleza del entorno y por la gran variedad de productos tradicionales y gastronómicos que se exponen, a pesar de los problemas de aparcamiento y los continuos embotellamientos de tráfico que se producen en la carretera. Hoy no ha sido una excepción.

La agenda ferial ya arrancó el pasado sábado con numerosos actos programados, aunque ha sido hoy domingo cuando la Fira de s´Oliva ha sido visitada de forma masiva, en una jornada soleada que invitaba al paseo entre los numerosos estands ubicados en la Plaça Major, la mayoría de ellos relacionados con el mundo de la oliva y sus derivados. Ya en la entrada del recinto ferial, los visitantes han podido disfrutar de una degustación de aceite y aceitunas. En la Plaça Major también ha habido espacio para la divulgación, con demostraciones del proceso de elaboración de la oliva. Antes de mediodía, se ha llevado a cabo la quinta edición del concurso de perros pastores en la finca de la familia Mateu Mairata.