La suspensión de licencias acordada por el pleno de Calvià en el marco de la revisión del plan general puede "demorar la materialización de ciertas expectativas urbanísticas particulares", pero es una medida que defiende el "interés general" para evitar "actuaciones urbanística sobrevenidas" una vez ha trascendido el contenido del avance.

Ésta es la respuesta que dio ayer el Ayuntamiento a las críticas expresadas por la Asociación de Constructores de Balears, que consideró "ilegal" la suspensión, a lo que se ha unido una alegación presentada por la Asociación de Promotores Inmobiliarios de Balears, advirtiendo de la indefinición de la medida. El Consistorio calvianer defendió que el acuerdo plenario explica "de forma pormenorizada" el tipo de licencias que se suspenden en cada una de las zonas afectadas. Así, recuerda que quedan en suspenso todas las que afecten a los 'falsos' urbanos y a suelos que estén calificados como EQ-R.