El conseller de Territorio, Marc Pons, ha anunciado el acuerdo por el cual se renueva la concesión, por 35 años, al Real Club Náutico del Puerto de Pollença (RCNPP). Este acuerdo será ratificado por el Consell de Govern del viernes próximo.

Pons se ha reiunido hoy con el presidente del Club Náutico, Alan Joseph Ponte; el jefe de Unidad del área de Gestión Directa de Ports de les Illes, Nicolàs Ferrer Pons; y representantes de la Federación de Asociaciones de Amarradores. Pons indica que se trata de “una concesión ligada a inversiones, lo que garantiza su función social, la promoción del deporte y la seguridad jurídica”.

Con este nuevo título y las inversiones acordadas, se garantiza que el Club Náutico modernice sus instalaciones y servicios “y pueda continuar siendo referente también en el siglo XXI de la náutica deportiva y social de calidad en la zona norte de la isla de Mallorca, a la vez que motor del deporte náutico, todo esto sin necesidad de ampliaciones ni consumir más territorio”, precisa Pons.

La concesión, como el resto de concesiones portuarias, finalizaba anticipadamente en 2018 por la aplicación de la Ley de Costas. La renovación evita el abandono de la gestión por parte del Club Náutico.

El nuevo título implica que el concesionario del Port de Pollença se compromete, además de garantizar servicios de calidad, a abonar a Ports de les Illes un canon de 454.175 euros anuales frente a los 20.770 anteriores. Igualmente, se compromete a realizar inversiones por un total de 6.981.660 euros, de las cuales ya se han ejecutado algunas por valor de 794.160 euros.

Las principales actuaciones son la remodelación del acceso al Club Náutico y un nuevo travelift (ambas ya ejecutadas); mejoras en muelle exterior y refuerzo del rompeolas; la prolongación de pantalanes para mejorar manga; mejora del muelle de espera; sustitución de losas en los pantalanes; mejora de los servicios y suministras; los nuevos edificios e instalaciones sociales, y la mejora de la eficiencia energética de los edificios.

Can Picafort

El conseller indica que los acuerdos alcanzados con diferentes clubes náuticos permitirán unos ingresos de 9'8 millones anuales para Ports, “sin que ello conlleve el aumento de amarres”. Esto supone que el organismo “dispondrá de recursos adecuados para prestar buenos servicios”, indicó Pons. Con esta adaptación sólo falta un puerto, el de Can Picafort (Santa Margalida), para adaptarse a la Ley de Puertos de las Illes Balears. En este sentido, es preciso indicar que antes de final de año está previsto que se apruebe la nueva concesión de Club Náutico de Can Picafort, con lo cual se finalizará el proceso de adaptación de los 29 puertos afectados por la finalización anticipada de las concesiones, previsto por la Ley de Costas para 2018.

Este nivel de resolución es el más alto de todo el Estado. “Balears destaca para aplicar una fórmula que da seguridad jurídica a los concesionarios; actualiza los cánones y mejora los ingresos para la Administración; compromete nuevas inversiones, y mejora la calidad de los servicios para los usuarios”, ha dicho Pons.