El santuario de Lluc ha sido este fin de semana el magnífico escenario de una nueva edición de la Fira de la Serra de Tramuntana, uno de los eventos comerciales temáticos de pequeño formato más interesantes de los que se organizan en el otoño mallorquín. Y no solo por la grandiosidad del entorno natural en el que se desarrolla la feria, sino porque los productos que pueden encontrarse tienen el inconfundible sabor de la tierra. La gastronomía propia y la artesanía tienen en la Fira de la Serra un buen escaparate para reivindicarse.

La XXIII edición de la feria se estrenó el pasado sábado con diversas actividades y visitas guiadas por el santuario de la Serra. No obstante, fue ayer domingo cuando el público hizo aparición de forma masiva para pasar un domingo soleado en la cordillera mallorquina. Cientos de personas de toda la isla llenaron el aparcamiento del santuario y pasearon durante toda la mañana por la pequeña feria artesanal instalada en la 'porxada' de Lluc.

Allí, los visitantes pudieron adquirir productos de todo tipo con el denominador común de su elaboración artesanal y ecológica. No podían faltar los estands dedicados a la gastronomía local, con los embutidos propios de la isla, o las cervezas artesanales, entre otros productos.

El mercado incluyó numerosos productos artesanales. j. frau

También había una gran variedad de artículos elaborados a mano y de productos ecológicos, además de prendas de vestir o plantas procedentes del jardín botánico de Lluc.

De forma paralela a la muestra comercial, la Fira incluyó numerosas actividades para todos los gustos. Hubo un concurso de pintura floral en vivo, visitas guiadas por el entorno del santuario, una muestra de ball de bot por parte de la Agrupació Aires de Tramuntana de Selva que causó una gran expectación en la explanada del santuario, la proyección de un documental sobre los 500 años de la Escolania de Lluc y un taller de elaboración de hierbas mallorquinas a partir de las plantas propias del otoño, entre otros atractivos.

Los diferentes estands se instalaron bajo la ´porxada´ de Lluc. j. frau

La Fira de la Serra de Tramuntana se cerró sobre las seis de la tarde con la entrega de los premios correspondientes al concurso de pintura y a la maratón fotográfica.