El ayuntamiento de Sóller inició el miércoles la tala de diversos árboles del interior del cementerio municipal que suponían una amenaza para las sepulturas, en tanto que, debido a su gran tamaño, representaban un peligro de caída en caso de fuertes vendavales. Se da la circunstancia que estos grandes árboles, alguno de ellos centenario, empezaban a morir. La concejalía de Medio Ambiento prevé llevar a cabo una repoblación próximamente.