Un nuevo grupo de arqueólogos de la Sociedad Aranzadi procedieron ayer a la excavación de una segunda zona del cementerio de Montuïri, en su búsqueda de los restos de los cuerpos de los cuatro campaners asesinados en octubre de 1936 durante la represión franquista.

Vecinos y expertos señalan este lugar, a unos 40 metros del primer espacio cuyos trabajos comenzaron este lunes, como el más probable donde pudieron ser enterrados. Varios lugareños recordaban ayer que en el momento de habilitar la fosa séptica que hay en el espacio acotado, los operarios se tuvieron que desplazar unos metros por la aparición de cuatro cadáveres.

En la mañana de ayer se empezó excavando cerca de una cisterna, donde no se halló nada relevante, a la espera de que entre mañana y el jueves puedan empezar a aparecer los restos de Miquel Mascaró Ballester Paes, Bartomeu Ballester Roig Catoi, Joan Vidal Sansó Apagafocs y Jaume Puig Puigserver Bestard Retat.