Manacor ha declarado la guerra a las empresas que utilizan señales, elementos públicos o vallas en suelo rústico para exhibir su publicidad. En tan solo unas semanas, los miembros de la brigada municipal han retirado más de 70 elementos publicitarios a lo largo del municipio y abierto expediente, por el momento, a los responsables de cuatro grandes vallas colocadas en distintas entradas a la ciudad y a Porto Cristo. Unos expedientes que ya están acarreando las primeras multas coercitivas.
La concejala de Urbanismo, Isabel Febrer (El Pi), explica que durante este verano el consistorio realizó una relación de todos los carteles publicitarios o rótulos, colocados ilegalmente en señalética propiedad del departamento de Carreteras del Consell, aprovechando el espacio entre los indicadores legales (sobre todo en señales que indican direcciones a calas o playas).
Retirados
Una vez inventariados, un decreto de alcaldía ha dado luz verde a miembros de la brigada y agentes de la Policía Local, para la retirada de la publicidad, sobre todo de establecimientos comerciales y lugares turísticos privados, como supermercados, multinacionales de la alimentación o las cuevas de Porto Cristo.
Al tratarse de propaganda en lugares o elementos públicos, el ayuntamiento de Manacor no se ha visto obligado a notificar la retirada a los propietarios de los carteles, como sí ha tenido que hacerlo en el otro frente abierto: las vallas publicitarias en suelo rústico, cuya proliferación ha sido alarmante durante el mes de agosto.
El departamento de Urbanismo ha puesto a sus celadores a trabajar para erradicar esta práctica; y aunque son más de una decena las vallas irregulares, de momento ya se han abierto cuatro expedientes por infracción urbanística, lo que implica la suspensión inmediata de la instalación y la determinación de un plazo para la legalización del proyecto o su retirada.
Según apunta Febrer las denuncias van dirigidas, por separado, a la empresa responsable, a la propiedad donde se levanta la estructura y a los encargados de haberla colocado. "Aprovechan los fines de semana o cuando cae la noche para hacerlo", lamenta, al tiempo que dice que "vamos a seguir adelante con las multas coercitivas, que pueden ir desde un mínimo de 600 euros hasta el 10% del valor que tenga lo construido en el momento de la apertura del expediente.
De hecho ya ha habido una empresa, propiedad e instaladora multadas por este hecho con 900 euros cada una, lo que se repetirá cada mes hasta que la valla no sea retirada o se legalice, cosa poco probable al tratarse como construcciones ilegales en suelo rústico y ser un elemento que puede despistar la atención de los conductores.
Estas multas pueden ser incluso más severas en el caso de que la empresa responsable, además de instalar la valla, ya haya expuesto su publicidad. En este caso el Ayuntamiento puede repetir el cargo de la multa cada diez días.
"Ya nos hemos puesto también en contacto con Carreteras para establecer un listado de elementos irregulares", explica la concejala. Lo que incluye al menos dos vallas o publicidad en paredes en la entrada a través de la carretera de Felanitx, al menos tres más cerca del polígono industrial, dos en la rotonda de Porto Cristo a Cala Mendia, otra en la ronda del Oest etc. Asimismo se sabe que algunas de las empresas ya han recurrido las denuncias, algunas con defensas tan inverosímiles como que el Ayuntamiento se la ha comunicado en agosto, mes supuestamente inhábil.
Por otra parte, el pleno de este lunes aprobó por unanimidad la adhesión del ayuntamiento de Manacor a la Agència en Defensa del Territori de Mallorca, dependiente del Consell. De esta forma el consistorio derivará todas las infracciones urbanísticas en suelo rústico, a partir de la firma del convenio, a los celadores y técnicos de la agencia. Actualmente el consistorio abre entre 100 y 120 expedientes de este tipo al año.
