Una de las calles más céntricas de Magaluf (Calvià) será objeto este invierno de un intenso lavado de cara, según las previsiones del Ayuntamiento, que prevé convertir esta arteria en una vía de circulación restringida. La obra, que ya se ha licitado, afectará al tramo comprendido entre la avenida de s'Olivera y la avenida Palmeras de Magaluf. La rehabilitación debería estar lista en la primavera de 2018, según la estimación municipal.

Desde el Consistorio calvianer, se informa de que el objetivo de la reforma es la "recuperación de espacios para esparcimiento", la supresión de barreras arquitectónicas, así como la mejora del drenaje, el alumbrado público y el arbolado.

El plan municipal pasa por establecer restricciones al paso de vehículos, con la finalidad de que sea "básicamente peatonal". El equipo de gobierno quiere además que esta zona gane en presencia de vegetación, de tal manera que sea "una especie de gran espacio ajardinado con pequeñas zonas de esparcimiento, en el que el peatón sea el protagonista". No obstante, se reservará un ancho de más de tres metros a cada lado para el paso de coches.

Este mes, el Ayuntamiento ha anunciado la licitación de la obra por un importe en torno a un millón de euros. El plazo de ejecución del proyecto que establece el plieglo administrativo es de cuatro meses. De todas formas, el mes que viene está previsto que el Consistorio convoque una reunión con vecinos y empresarios de la zona para explicar el plan y escuchar las sugerencias que se quieran presentar.

También se convocará en octubre una reunión con residentes y comerciantes de Peguera para explicarles otro importante proyecto de reforma viaria para este invierno. Se trata de la remodelación de la calle Tarongers, que discurre paralela al Bulevar de Peguera, y de parte de las arterias adyacentes: Torà y Pins, que desembocan en la avenida principal de la localidad.

Según remarca el Ayuntamiento, "son viales de anchura muy escasa que no permiten el tránsito con comodidad de las personas con movilidad reducida y los carritos con niños, debido a los numerosos obstáculos que se encuentran y al arbolado".

Por eso, la administración municipal considera necesaria una ordenación del paisaje viario, como puedan ser señales, farolas u otro tipo de mobiliario urbano, de modo que se despeje la vía de obstáculos.

Además, el plan contempla soterrar los tendidos eléctricos y de telefónica y adecuar las pluviales a los caudales de agua que recibe durante las lluvias.

En este caso, la obra acaba de salir asimismo a licitación por un importe de 409.814 euros, con un plazo estimado de ejecución en torno a los cuatro meses y medio. Como en el proyecto previsto en Galeón, la previsión municipal es empezar la obra este invierno para finalizarla en primavera.