La Quintada Llosetina ha tenido este año, en su cuarta edición, una novedad agradable, Sa Pregonada, que fue pronunciada desde un balcón de la calle Mestre Antoni Vidal a las doce de la mañana de ayer.

Fueron unos minutos de diversión a cargo de los dos humoristas locales Eusebio Robles y Manolo Cebreros, ambos arrancaron risas y aplausos.

Hasta las dos de la tarde, hora de servirse la comida de compañerismo, las mil personas, repartidas en 45 quintadas asistentes al evento, crearon un ambiente de fiesta en las calles céntricas de Lloseta. La comida fue servida por 13 bares y restaurantes de la localidad a un precio único de 15 euros más un euro por mantenimiento de la carpa instalada en la explanada de la avenida del Cocó.

La quintada más joven perteneció a los nacidos de ambos sexos en 1999 y los más veteranos fueron los de 1954.

Sa Capsaneta

A las cinco de la tarde, empezó en la avenida del Cocó, una fiesta con dj's que duró hasta bien entrada la noche. Los jóvenes y no tan jóvenes disfrutaron a pesar del calor que reinó durante todo el día.

El evento estaba organizado por la asociación local Sa Capsaneta con la colaboración del ayuntamiento de Lloseta.