El alcalde de Escorca, Antoni Solivellas, exige a la conselleria de Medio ambiente que vuelva a colocar los contenedores de residuos que retiró de las áreas recreativas, responsabilizándose de su recogida a través de la Ibanat. Solivellas transmitió su reclamación al conseller Vicenç Vidal después de comunicarle el "fracaso" de la campaña Torna els fems a casa, implementada a principios de este año mediante la cual el Govern solicita a los usuarios de los citados espacios que se hagan cargo de los residuos generados hasta el regreso a su domicilio.

Para Solivellas, esta campaña "ha sido un auténtico fracaso puesto que no se explica que, entre enero y junio de 2016, se recogieran en toda Escorca 165,22 toneladas de residuos y en el mismo periodo de 2017 se hayan recogido casi 166. Eso demuestra que los usuarios, o dejan abandonados los residuos, o los depositan en el primer contenedor de Escorca que encuentran a su regreso y por los que nos vemos obligados a pagar todos los vecinos".

Solivellas presentó ayer los números de un estudio realizado por el Ayuntamiento que demuestra que, en el período de un año, en el torrente de Pareis se recogieron 35 toneladas de residuos, mientras que en las áreas recreativas, acampada y refugios se recogieron 150 toneladas. En conjunto, se recogieron unas 180 toneladas de residuos, que representan el 43% del total de los residuos generados en Escorca.

Esta cantidad total refleja una media de 1,7 tonelada al año por habitante frente a las 0,4 toneladas al año por habitante en otros municipios de Mallorca, cosa que, en opinión de Solivellas "es absolutamente irreal e injusto y obliga los vecinos de Escorca a pagar por unos residuos que está claro que no generan".