El Govern comprará la emblemática finca artanenca de Es Canons, situada entre la Colònia de Sant Pere y Betlem, por ocho millones de euros procedentes de parte de la recaudación por la tasa turística. Así lo anunció ayer el ayuntamiento de Artà, cuyo
Es Canons, que consta de una extensión natural de 1,8 millones de metros cuadrados, será adquirida por el Ejecutivo Autonómico con fondos procedentes del impuesto de turismo sostenible para que, de esta forma, pueda ser incorporada dentro del Parque Natural de Llevant, tal y como lleva años solicitando el consistorio artanenc. "Es el resultado de años de trabajo por parte del Ayuntamiento y una muy buena noticia para la comarca", ha resaltado el alcalde socialista.
Precisamente a finales de junio, un mes después de acceder a la alcaldía, Galán se reunió con la presidenta del Govern, Francina Armengol, en el Consolat de Mar donde la compra de la finca fue una de las cuestiones que se pusieron sobre la mesa. La adquisición de Es Canons fue uno de los cuatro proyectos que el ayuntamiento de Artà presentó para que se financiaran con cargo al impuesto de turismo sostenible.
En su propuesta, la corporación municipal señaló que permitiría de esta manera la ampliación del Parque de Llevant, la apertura de un nuevo tramo de la senda GR-222, y la posibilidad de poner a disposición de las instituciones pertinentes las viejas construcciones para su reconversión en refugios.
En el pleno municipal de octubre de 2015, ya se aprobó por amplia mayoría iniciar los trámites para pedir al Govern Balear la compra de la finca. Igualmente, en un pleno realizado en el mes de octubre de 2011 el Ayuntamiento había aprobado instar al gobierno estatal su adquisición, pero no obtuvo respuesta. Es Canons es Área Natural de Especial Interés (ANEI), está incluida en la Red Natura 2000 y pertenece al Lugar de Interés Comunitario (LIC) de las montañas de Artà.
Años en venta
La finca de Es Canons llevaba desde hace unos años en venta. La propiedad, Cala Veya SL, llegó a hacer una oferta al Ayuntamiento por 20 millones de euros. Mayor que la ofertada en distintos portales de venta de terrenos, que rondaba los 15 millones de euros. Unos anuncios que presentaban la finca como suelo urbano, aunque en realidad está calificada como suelo rústico protegido, de ahí que el precio que pagará el Govern se ajuste más a la tasación real de mercado.
