Dos semanas después de su inicio, las esperadas obras de reforma de la fachada principal de la iglesia gótica de Santa Maria de Sineu han dejado al descubierto un elemento ornamental desconocido hasta la fecha por la parroquia y por el obispado de Mallorca, promotor de la intervención. Se trata de una pequeña ventana circular, cuya forma es conocida popularmente como ojo de buey, que está ubicada a la derecha de la entrada principal del templo (si uno mira hacia la plaza), a una altura de unos dos metros desde el suelo.
El hallazgo ha provocado la "sorpresa" de los trabajadores de la empresa Refoart S. L, contratada por el obispado para ejecutar las tareas de reforma de la fachada, y también de los responsables patrimoniales de la Iglesia de Mallorca, que han empezado a estudiar el origen de la misteriosa ventana que no consta en los archivos.
Tomeu Bennàssar, arquitecto del obispado, explicó ayer a este diario que el hallazgo de la ventana se produjo el pasado martes y que de forma automática se empezó a estudiar el elemento para determinar su datación. De momento, todo son hipótesis, pero los expertos no descartan que el ojo de buey corresponda a la primera época de la parroquia de Santa Maria, ya documentada en el año 1248 (siglo XIII), aunque el gran incendio de 1505 obligó a reconstruir prácticamente todo el templo de origen gótico, posteriormente ampliado a finales del siglo XIX.
La ventana se aprecia a la izquierda de la entrada principal del templo. J.F.
"El hallazgo de la ventana nos ha sorprendido mucho porque hemos comprobado que en unas fotografías de 1915 no aparece este elemento", explica el arquitecto del obispado. El ojo de buey solo es visible desde el exterior del templo y no comunica con el interior. "Deberemos recabar información en los archivos para ver si algún documento habla de esta ventana", añadió el técnico.
De momento, se desconoce si el nuevo elemento también formará parte del proceso de reforma para que permanezca en la fachada o bien se opta por taparlo de nuevo. "Hay que hablar con los técnicos de Patrimonio para tomar una decisión", apunta Bennàssar.
Las obras de reforma de la fachada parroquial, esperadas desde hace varios años, se iniciaron hace dos semanas y está previsto que se prolonguen entre 6 y 9 meses más "en función de lo que se vaya encontrando". Las obras tienen un coste aproximado de 170.000 euros.
