Las estrategias de márketing de las empresas generan algunas veces ampollas por el contenido de sus mensajes publicitarios. El último en causar controversia ha sido Trono, una compañía que comercializa una silla inflable que uno se puede llevar adonde quiera.
En este caso, es el inicio de su vídeo promocional el que ha levantado una gran polvoreda, porque se ve a un joven muy sonriente que toma carrerilla y salta desde su balcón a una piscina, donde hay otro grupo de jóvenes tomando el sol con las mencionadas sillas. La escena remite al ´balconing´, esa trágica práctica a la que se entregan turistas, sobre todo jóvenes, con resultados por todos conocidos.
En las redes sociales, el vídeo ha generado una catarata de comentarios negativos, que se sintetizan en las siguientes frases, recogidas de la página de Facebook de la compañía: "Mi prima trabaja en urgencias del hospital de Eivissa y ha visto a varios individuos después de hacer eso y muchos se matan y algunos peor, se quedan tetrapléjicos"; " ¿Apología del ´balconing´ para vender una silla? Esto es el colmo del capitalismo; todo vale para vender tu producto, ¡incluido dar publicidad a una práctica ilegal y peligrosa!"; " Muy bonito el anuncio con el tipo saltando desde la ventana a la piscina, muy bien bravo por vosotros por incitar a que la gente se rompa la crisma". Y la lista de comentarios podría seguir con decenas de mensajes parecidos, evidenciando la indignación de muchas personas por la utilización del ´balconing' como gancho comercial.
